Pido la palabra
Las campañas electorales están signadas por ofertas que tocan el sentimiento más profundo de la gente. Generalmente, las carencias de los más necesitados son abordadas, estratégicamente, por el llamado marketing político, para hacer de las necesidades de los más humildes un vehículo mágico para captar los votos que le permitan a los candidatos acceder al poder. En este juego de persuasión propagandística,
muchos ciudadanos cifran sus esperanzas de vida, en las ofertas que de buena fe reciben de sus aspirantes a cargos de representación popular. Votan por ellos, bajo la esperanza de ver cristalizar sus aspiraciones más sentidas. Una casa. Un buen empleo. Buenas escuelas para sus hijos con las tres papas diarias. Un buen sistema de salud en el barrio. Seguridad ciudadana para transitar sin el temor a ser atracado o asesinado. Un sistema de cloacas que dignifique la vida. Un excelente servicio de agua potable que garantice la salud de los hijos. Un excelente servicio de energía eléctrica, sin fallas que dañen los artefactos electrodomésticos que con tanto sacrificio se compran. En fin, la fe de un pueblo que busca el cumplimiento cabal del mandato popular dado a través del sufragio. Porque los gobernantes deben estar a tiempo completo al servicio del pueblo que los eligió. Jamás pueden degenerar en burócratas al servicio de sus pecuniarias causas personales…
El presente gobierno no ha sido la excepción. Despertó la esperanza de millones de venezolanos que confiaron en la palabra empeñada de un hombre que cautivo a todo un país con su verbo de profunda penetración popular. La esperanza de los más necesitados, de los “chancletudos” como suele llamarles, se hizo oferta electoral para colocar el acento sobre el sentimiento colectivo de las grandes mayorías. Los sueños de los pobres despertaron nuevamente para convertirse en una avalancha de votos en favor de una revolución encarnada en un militar retirado llamado Hugo Chávez…
Casi catorce (14) años han transcurrido desde que esos sueños se centraron en un gobierno para los pobres. Los resultados están a la vista de todos. Razón por la cual es importante analizar con objetividad algunos aspectos medulares del proceso revolucionario. En este contexto, la Corporación Jacinto Lara (Extinta FUDECO), institución creada por el gobierno de Hugo Chávez y dirigida por Luís Reyes, tiene un presupuesto asignado de 160.000.000 (ciento sesenta millones de bolívares fuertes), los cuales maneja el diputado Luis Reyes y su entorno de poder, a su propia discreción y capricho, sin controles de ninguna naturaleza desde le punto de vista contable, ante la inexistencia de una Contraloría que supervise las inversiones realizadas por esa institución. Ese presupuesto es equivalente a lo recibido por la Gobernación del estado Lara a través del FCI, durante el año pasado (2011). Nos preguntamos los larenses: ¿Qué ha hecho Reyes con ese realero? ¿Donde están las obras y las veinticinco mil casas que ofreció Luis Reyes para los pobres del estado Lara ?… Se percibe una gran mentira encubierta en regalos en efectivo. Una casita por aquí. Otra casita por allá. Las necesidades actuales de viviendas en Lara están en el orden de las 175.000 casas. ¿ Por qué Hugo Chávez, Luis Reyes, Amalia y Luis Jonás Reyes no han resuelto el problema habitacional de los larenses, si han manejado los recursos más gigantescos que jamás ha tenido este país en toda su historia ?…
Otro aspecto importante que resaltar en este cuadro de esperanzas e ilusiones desechas por las mentiras del gobierno, es el que tiene que ver con el cemento y la cabilla que utiliza la gente en los barrios para hacer su casita y ampliar sus cuartos. Se estatizaron las fábricas de cemento y cabilla para favorecer al pueblo humilde. Yo quisiera saber donde se puede comprar un saco de cemento a 20 bolívares, tal y como lo establece el precio regulado por el gobierno nacional. Asimismo, quiero que me digan donde se puede comprar una cabilla de ½”, ¾” o tripa de pollo, a precio regulado. Vmos a estar claros en algo, esto de la cabilla y el cemento se ha convertido en un gran negocio para unos pocos vivos que especulan y se enriquecen con la esperanza de los pobres…
El problema del gas doméstico. Confiscaron las empresas y destruyeron la flota de camiones que distribuía el gas doméstico en las barriadas populares de todo el país. Ahora la gente de los barrios en Lara, específicamente, tiene que hacer un enorme sacrificio para llevar su bombona al llenadero de la Zona Industrial. Se van en rapidito con la bombona entre las piernas, con el riesgo que ello implica. Pasan horas en la cola para llenar su bombonita, en un hecho que resulta realmente humillante. Otro engaño del gobierno de Hugo Chávez…
Mis comentarios:
.- ¿Que ha pasado con la Universidad Bolivariana, convertida en 2 hectáreas de columnas abandonadas y promesas incumplidas de Hugo Chávez?…
.- Un embuste de Hugo Chávez para la gente de Juan de Villegas. Un cementerio de columnas abandonadas en el corazón de la parroquia más grande de Lara…
.- Hugo Chávez le ofreció al país 22 universidades. ¿Dónde están, luego de 14 años en el gobierno ?…
Aunque atraviese un valle de tinieblas, no temeré ningún mal, porque Tú vas conmigo. Tu bastón y Tu cayado me infunden aliento…(Salmo 22:4)
