Cuando ya se conocen las propuestas del candidato-presidente y la de Henrique Capriles Radonski, candidato de la Alternativa Democrática, el coordinador nacional de Primero Justicia y diputado a la Asamblea Nacional, Julio Borges, indicó que “el de Henrique Capriles representa el futuro, el progreso y la justicia por la que claman los venezolanos”.
“Mientras que el del otro candidato encara el pasado de 14 años de fracaso y de promesas incumplidas y el presente de inseguridad, violencia y estancamiento”, comparó el político.
Según Borges, en el plan del progreso se hace énfasis en atender los principales “y más sentidos problemas de los venezolanos que son el empleo, la seguridad, la educación y la salud de calidad, creando las condiciones para que nadie se quede atrás, generando confianza y oportunidades”.
Al frente –dijo Borges- nos presentan un plan que “ya conocemos, un refrito de las promesas incumplidas del plan 2006–2012. Como ha dicho Henrique Capriles, el gobierno se preocupa por salvar al planeta y crear un mundo pluripolar, sin entender que primero necesitamos ocuparnos de los venezolanos. El presidente ha demostrado hasta el cansancio que su único interés es mantenerse en el poder”.
“Nuestro Plan tiene como prioridad a la persona, a los venezolanos. Tanto es así que la estructura que nos sirve de soporte está concebida desde el ciclo de vida del ser humano, yendo desde todo lo que tiene que ver con la atención materno-infantil hasta la salud y la seguridad social, pasando por la vivienda y su entorno, la educación y el desarrollo, y el empleo y el emprendimiento. Dentro de estas etapas están todos los temas vinculados con el ejercicio de gobierno”, explicó Borges.
En contraste, el diputado señaló que “el plan, que se dice Socialista tiene como prioridad mantener el Poder, incluso como vía única para resolver los problemas de la Patria y, por último, los de la gente. Esto se pone en evidencia desde su primer punto, que dice textualmente: Lograr una sólida, combativa y festiva victoria en las elecciones presidenciales del 7 de octubre de 2012, que eleve la moral del Pueblo venezolano y de los pueblos del mundo en su lucha por la emancipación”.
En la comparación establecida por Borges, el dirigente de Primero Justicia apuntó que “en el plan del candidato-presidente se elude absolutamente la resolución de problemas como la inseguridad,