Según estudios realizados científicamente está comprobado que la inteligencia del hombre no tiene límites.
También se dice que el porcentaje de utilidad es muy bajo. De acuerdo a estos estudios los venezolanos nos preguntamos ¿por qué no se ha podido inventar un plan, una estrategia, que extermine y desaparezca el grave problema de inseguridad que vivimos todos los venezolanos? Otros se preguntan, ¿será que al gobierno no le interesa buscar la solución para mantener distraídos a los ciudadanos ante la mala administración que han realizado?
Estas y muchas preguntas se escuchan en la calle, de boca de ciudadanos desamparados por la justicia venezolana. Al respecto, insisto, que nuestra Constitución, es muy clara, en relación a los Derechos Humanos. Se fundamenta en sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional.
Además, el Estado tiene como fin social, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes consagrados en esta Constitución. Y, si nos metemos, de manera, más profunda en nuestra Constitución, nos daremos cuenta que este gobierno les ha violado todos los derechos, a todos los venezolanos que por ley les corresponde vivir, tener una buena alimentación, bajar los costos de la cesta de alimentos, invertir más en nuestro país, dedicarse más a gobernar que a pelear, respetar a nuestros niños cuando utilizan los medios de comunicación en horario infantil. Es decir, estas y muchas otras cosas molestan a muchos venezolanos nacidos en una Venezuela de respeto, de unión, de paz, y que, lamentablemente, ven, cómo se han perdido los valores, en general.
Ante todo este panorama planteado, continúa la lluvia de preguntas. ¿Para qué tener un gobierno que está a espaldas de los problemas del pueblo? ¿Para qué tenemos una Constitución, si todas las personas son iguales ante la ley, y no hay respeto? ¿Para qué retirar a Venezuela de la Corte Interamericana de Derechos humanos, si igual estamos indefensos y desprotegidos? ¿Para qué invertir tanto dinero en la compra de armamentos, si la única guerra que tenemos los venezolanos, es interna, es contra el hampa desbordada? ¿Para qué una Ley Desarme si no se ve por ningún lado? ¿Para qué la descentralización si el gobierno no logró solucionar los problemas? ¿Para qué tratar de ocultar la verdad del problema de inseguridad, que vivimos los venezolanos, si la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos de la OEA, metió a Venezuela en una lista negra por no garantizar los Derechos Humanos?
Y, para concluir, este tipo de tema produce una gran cantidad de preguntas, que se necesitaría todo un periódico para plantearlas. Recordando a nuestro genio y padre, Simón Bolívar: «El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política».
