La escalada de violencia del fin de semana en Barquisimeto y otras poblaciones del estado Lara alcanzó este domingo al barrio El Garabatal, al suroeste de la capital, cuando dos adolescentes fueron acribillados a balazos, aparentemente, por los miembros de una pandilla opositora.
Los vecinos de la avenida María Pereira de Daza (principal), entre calles 4 y 5, fueron sorprendidos cerca de las tres y media de la tarde por gran cantidad de detonaciones en la vía pública.
Cuando cesaron las mismas y con mucha precaución salieron de sus casas, observaron en un callejón los cuerpos sangrantes de dos jóvenes que luego se dijo residían en una invasión cercana y que tenían 16 y 17 años, cuyos nombres no pueden darse a conocer públicamente de acuerdo a disposiciones de la Lopna.
Ninguno de los vecinos consultados dijeron conocer a las víctimas y descartaron hayan sido residentes de El Garabatal.
A pesar de que nadie ofreció versión alguna sobre lo ocurrido, se pudo conocer que los dos jóvenes eran perseguidos por otras personas, presuntamente en un vehículo, y en su desesperación ingresaron en el callejón pensando podían escapar de sus perseguidores.
Sin embargo, el ataque a balazos continuó hasta que ambos fueron impactados por algunos de los proyectiles, desplomándose en la vía.
El o los autores del doble asesinato, una vez logrado su objetivo, desaparecieron de la zona sin que nadie pudiera reconocerlos.
Posteriormente llegaron al lugar familiares de las víctimas para reconocerlos.
«Esa plomazón fue muy grande. Parecía que estábamos en una guerra porque se oyeron como cincuenta tiros y nosotros lo que hicimos fue meternos debajo de las camas no fuera a ser que una bala nos tocara a nosotros», dijo una anciana residente en el sector.
Otro vecino, quien prefirió no identificarse, manifestó que los dos jóvenes procedentes de la invasión, acostumbraban deambular por El Garabatal, atribuyéndoles algunas faltas en perjuicio de los residentes.
Los funcionarios de la comisaría San Juan del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas que actuaron en el procedimiento recogieron cerca de treinta casquillos de los proyectiles disparados contra los dos adolescentes.
Aparentemente los disparos fueron hechos con una o más pistolas 35 milímetros.
En el sitio del suceso cobró fuerza la tesis de que se trató de una venganza por parte de alguien que se sentía afectado por algunas actuaciones de los dos jóvenes y decidió hacer justicia por sus propias manos ante la falta de autoridad.
Heridos
En el HC se encuentran recluídos José Ramón Delgado (50) y Ramón Antonio Delgado González (27), quienes fueron heridos a tiros, el primero en el abdómen y pié izquierdo y el segundo en el abdómen, cuando salían de una tasca en la avenida Vargas.
Fotos: Jairo Nieto