Las nuevas leyes económicas de orden económico aprobadas vía Habilitante por el presidente de la República, Hugo Chávez, causaron molestia entre los voceros empresariales quienes consideran que la discusión es esencial para la conformación de normas adaptadas a las verdaderas necesidades del país.
En horas de la noche del viernes, el Jefe de Estado aprobó la reforma a la Ley de Viviendas, la cual da potestad al Banco Nacional de la Vivienda (Banavih) a hacer seguimiento a las empresas, sobre las contribuciones que efectúan los trabajadores para el Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda.
Al respecto, Benito Barcarola, presidente de la Cámara de Bienes Raíces del estado Lara, destacó que es inaceptable que se promulguen leyes en desconocimiento de los factores que resultarán afectados. «Las leyes deben tener el mejor y mayor alcance.
Se está cometiendo un error, pues el aporte que damos las instituciones puede ser muy valioso para la construcción de estas normativas».
A juicio de Barcarola, es esencial que la reforma sobre la Ley de Vivienda aclare el desempeño y las atribuciones del Banco Nacional de Vivienda y Hábitat (Banavih), por cuanto las dudas han causado estragos en el sector. «En marzo de 2012 circuló un decreto en el cual Banavih goza de nuevas funciones, entre ellas la aprobación o rechazo de proyectos de construcción para el otorgamiento de créditos al constructor. Ante esta medida, los bancos ya no dan créditos hasta que el Banavih apruebe los proyectos».
El dirigente gremial aseguró que los funcionarios del Banco Nacional de Vivienda desconocen totalmente esta disposición oficial, situación perjudicial para el desarrollo de importantes proyectos de construcción. «Hay una desinformación absoluta, ojalá que esta modificación a la ley venga a aclarar las dudas inmensas que tenemos en el sector. Cuando vamos al Banavih, nadie sabe cómo es el mecanismo para aprobar los proyectos y recibir las carpetas».
Explicó Barcarola que el gran error del Gobierno es promulgar leyes, sin siquiera prever los mecanismos para su ejecución. «Lo mismo ocurrió con la Ley de Arrendamiento de Viviendas, la cual nadie sabe cómo ponerla en práctica».
En este sentido, los promotores inmobiliarios esperan que las dudas sean respondidas con celerad, en aras de que el sector pueda reactivarse.
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