Carlos Pérez es el nombre de «El Guli», un famoso personaje del municipio Jiménez, quien ha sido señalado por diversos cuerpos de seguridad de ser el autor material de múltiples homicidios cometidos en dicha entidad, además de participar en el secuestro y extorsión de muchos productores quiboreños.
Este hombre sumó una víctima más a su fatídica lista, cuando a las 8:45 de la noche del viernes le quitó la vida a Detsy Ramona Díaz, de 29 años de edad. La misma fue interceptada en las adyacencias de la iglesia de Guadalupe.
Díaz no era una persona desconocida para «El Guli». Se trataba de su ex pareja con quien compartió dos años de vida amorosa. Aparentemente la dama decidió abandonarlo porque la relación no estaba funcionando y rehizo su vida, situación que no tenía muy contento a «El Guli», por ello, cuando la vio, y tuvo la oportunidad, la ultimó.
Lo esperaban en la plaza
Todo comenzó cuando «El Guli» se fue hasta la población de Guadalupe en compañía de sus secuaces para ubicar a un enemigo que sabía estaba bebiendo por la plaza Bolívar de dicha población. Según cuentan los habitantes de la zona, los enemigos de «El Guli» sabían que venía y también se armaron para esperarlo.
«El Guli» se trasladaba en una camioneta Hilux blanca, doble cabina, último modelo; junto a él iban «El Pelao», «El Yuquita», «El Guley» y otra persona que responde al nombre de Anderson. Una Ford blanca también se unió al grupo. Era manejada por un sujeto conocido como «Richard» y otro sujeto del cual se desconoce su identidad, para hacer un total de siete personas.
Al encontrarse las bandas comenzó el enfrentamiento entre ambos, pero un grupo tuvo que desistir porque se vieron superados por «El Guli» y su banda que portaban armas de alta potencia, con selectores ganaron la batalla, pero en el encuentro no dejaron a nadie herido. «El Guli» ordenó retirarse y en la vía observó que en una motocicleta venía Detsy Díaz su ex mujer, quien se trasladaba junto a su actual pareja.
«El Guli» dio la vuelta a su camioneta y comenzó a perseguirlos hasta que los motorizados se estrellaron contra una pared, cerca de la iglesia.
El acompañante de la dama escapó. «El Guli» se bajó del vehículo y al ver a la joven tirada en el piso le reprochó el haberlo abandonado y rehacer su vida con otro y sin pensarlo dos veces disparó en contra de ella. Dicen que «El Yuquita», otro de la banda, también disparó en contra de la dama.
Al menos 30 disparos en su humanidad presentó la muchacha, quien perdió la vida en un abrir y cerrar de ojos.
Una vez que cometieron el crimen se fueron. Parte de los moradores de Guadalupe ya cansados de las andanzas de este delincuente, se armaron y salieron detrás de ellos. Alrededor de 30 motocicletas los persiguieron hasta la autopista de Quíbor, disparos iban y venían pero «El Guli» y sus compinches pudieron escapar.
Al lugar de los hechos acudió una comisión del Grupo de Trabajo Contra Homicidios del Cicpc para hacer las respectivas averiguaciones del homicidio. Cabe destacar que el rumor de que «El Guli» era el autor del hecho sangriento llegó a oídos de los sabuesos, quienes trataron de entrevistar a los habitantes de la zona y todos callaban por temor; ninguno quiso atestiguar sobre lo sucedido.
De igual forma lo hicieron los seres queridos de la joven, quienes a las afueras de la morgue decidieron callar y no declarar nada al respecto a los medios de comunicación. Se conoció que era madre de tres hijos.
Delincuente protegido
Por denuncias de los habitantes del municipio Jiménez, quienes no quisieron identificarse por temor a represalias, indicaron que «El Guli» es una persona protegida por personas poderosas del municipio Jiménez.
Aseguran que la camioneta Hilux último modelo en la cual se traslada el hampón se la regalaron. Además es protegido, presuntamente, por funcionarios, pasando de largo en las alcabalas a sabiendas de que se trata de un sujeto evadido de la justicia, pues tiene múltiples solicitudes por el delito de homicidio, una de ellas emanada el 27 de abril del 2010.
Algunos funcionarios de diversos cuerpos de seguridad proceden a cobrarle su respectiva vacuna para no detenerlo.
El llamado que hacen los habitantes de este municipio es a los jefes de esos cuerpos de seguridad, para que investiguen dichas irregularidades y le den un freno a este delincuente que es la persona que mantiene azotado a este municipio.
Fotos: Elías Rodríguez
