El 23-05 publicaron en este diario un artículo relacionado con obras de la alcaldía de Palavecino en la que hacen referencia a declaraciones dadas por la Ing. Norma Vitoria, gerente de la oficina de Planificación y Desarrollo Urbano, donde dice textualmente que «lamentablemente los dos árboles centenarios que quedaron atravesados serán talados cuando el Ministerio del Ambiente otorgue el respectivo permiso, para luego sembrar otras especies en lugar cercano para resarcir el daño ecológico».
Como dos árboles centenarios quedaron atravesados, ¿no será que los atravesados son los que planifican el desarrollo urbano del municipio?
Que gratificante hubiera sido leer: las obras se retrasaran porque es necesario ajustar el proyecto inicial para no afectar a dos árboles centenarios, lo que posiblemente también afectaría el costo del mismo.
Dios quiera que el Ministerio del Ambiente no actué con celeridad, ya que ahora las alcaldías están muy apuradas en presentar obras, aunque la mayoría de ellas se quedan gigantescas vallas publicitarias anunciándolas. En estos casos, sí debería actuar el Ministerio del Ambiente, por causar contaminación, por lo desagradable de ver en ellas los rostros de las autoridades, la millonada que gastan haciéndose publicidad como si la obra saliera de sus bolsillos. ¿Será que desconocen cuáles son las funciones del cargo que representan?
Volviendo al primer párrafo donde dice: sembrar otras especies en un lugar cercano para resarcir el daño ecológico.
¿Cómo se pueden resarcir 100 años por 2, si lo que siembran en Palavecino son palmeras, las que necesitan riego constante durante los dos primeros años, pero mueren por falta de agua? ¿Dónde están los árboles, que aporan oxigeno, bajan la temperatura y son el hábitat de los pájaros que, lamentablemente, tampoco se salvan de las expropiaciones que pretenden efectuar.