El bailaor español Antonio Canales se presentó en el Aula Magna de la UCV con su espectáculo Antojo, que estará esta noche en Valencia, y en el Teatro Juares de Barquisimeto los días 26 y 27 de mayo.
A las 7:00 pm. comenzó la presentación con el venezolano David Moreira Fusión, quien llegó con importantes músicos venezolanos para desatar ovación entre los presentes, quienes se levantaron para aplaudir al violinista, y a sus cómplices musicales, que dejaron atónitos a todos con su perfecta ejecución.
Para cantar uno de los temas invitó al escenario al Goyo Reyna, quien con su sangre flamenca interpretó El Alcaraván. En el bajo se destacó David Peña, en el cajón Diego Álvarez “El Negro”, en la guitarra Nestor Viloria y el joven prodigioso en el cuatro.
“Gracias por venir y vernos. Gracias Antonio Canales por aceptar esta invitación que he dedicado a mi madre, quien fundó esta sala, ella está en un palco privilegiado, no la podemos ver, pero ella nos ve desde las alturas”, dijo Moreira.
Luego de su participación llegaron al escenario tres bailaoras venezolanas: Keyla Pineda, Elisa Alvarez y Leonor Cortez, quienes forman parte de la agrupación Loco Caballero. Las féminas, con abanicos, hicieron retumbar sus pasos en la tarima.
El español
A las 8:00 pm. llegó Antonio Canales al proscenio, vestido de negro y con sus cabellos largos. Entró acompañado de cuatro músicos y dos cantaores, quienes comenzaron su espectáculo con la pieza que le da nombre al espectáculo, Antojo.
El bailaor español de 50 años bailaba pausado, mientras observaba a su público. Por momentos chasqueaba los dedos y con sutileza movía sus brazos, palpaba su cuerpo y regalaba su pasión flamenca. No con la misma euforia de sus años mozo, pero con la técnica.
Se quitó el saco para seguir su actuación. Su rostro empapado mostraba su entrega, aunque sus seguidores le gritaban a todo pulmón su nombre para pedirle más furor en el escenario. Se retiró para darle paso a sus tres bailaoras.
Tres féminas que conmocionaron la escena con su baile. Diosas que movieron sus cuerpos con una agilidad tremenda. Sus pies eran veloces y hacía sonar su tacón de forma descomunal. Ellas fueron las estrellas de la noche, quienes deslumbraron con su talento. Entre ellas destacó la bailaora Mónica Fernández en la pieza Heridos de Amor.
Luego de su actuación regresó el español a la tarima con otro atuendo, volvió renovado para desplegar su baile con más fuerza y energía. El español se despidió del escenario a las 9:20 pm.