Un peligro representan para los usuarios de la autopista Centroccidental, concretamente en el tramo de Las Trincheras, en Yaritagua, las lagunas que allí se forman cuando llueve.
El doctor Ricardo Fuenmayor, luchador social, denunció que ante la falta de drenajes que los realizadores de ese tramo vial se olvidaron construir o están obstruidos, el agua de lluvia se empoza y muchos han sido los conductores que han pasado sustos al caer en ellos y perder el control de sus vehículos.
Dijo Fuenmayor que el peligro mayor se forma en el sector El Trocadero, donde el agua permanece estancada por días antes de ser secada por los rayos solares.
Por otra parte, recordó que hace diez meses el gobernador de Yaracuy se comprometió con los yaritagüeños a construir el puente distribuidor de Tierra Amarilla, obra a la que se destinaron 10 mil bolívares.
Con ese puente se evitarían los frecuentes arrollamientos de personas.
Cuando se pensaba que en pocos días se iniciarían los trabajos, sorpresivamente llegaron cuadrillas de obreros y desmantelaron la pasarela peatonal de la calle 8 y la trasladaron al sector El Pegón, y no hicieron el distribuidor.
A cambio colocaron un punto de control de la policía para obligar a los conductores a reducir la velocidad, lo que no elimina el problema pues los uniformados no pueden permanecer en el lugar las 24 horas del día y por lo tanto los trágicos arrollamientos continúan, en especial en horas de la noche, cuando las personas deben cruzar la autopista a todo riesgo de perder sus vidas.
Foto: cortesía Fuenmayor