Varias demandas se acumulaban el miércoles contra Facebook, los bancos que impulsaron su salida a bolsa y el índice Nasdaq, luego que inversores descontentos buscan mitigar pérdidas tras el decepcionante debut, donde la empresa recaudó 16.020 millones de dólares.
Al menos cuatro demandas fueron presentadas argumentando que la red social Facebook y los principales bancos que actuaron como agentes colocadores de sus títulos habían ocultado información crucial a los pequeños inversores.
El gobierno del estado de Massachusetts emitió una orden de comparecencia contra el principal agente colocador del debut bursátil, Morgan Stanley, por el manejo de la información relativa a la masiva venta de acciones.
Además, un inversor demandó a la plataforma de intercambio Nasdaq por los daños resultantes del fallo técnico que retrasó la salida en bolsa de las acciones de Facebook el viernes, retardando o impidiendo ejecuciones de compra de millones de títulos durante las operaciones.
Las demandas plantean que Facebook y sus directivos, y los bancos que impulsaron la entrada a bolsa de la red social, violaron las normativas de valores al emitir información «falsa y engañosa» en documentos oficiales antes del debut bursátil.
Ellos no informaron que en la víspera del debut bursátil, los principales agentes colocadores recortaron las previsiones de ingresos y «ese dato de una caída de las estimaciones fue transmitida solamente a un puñado de grandes clientes, no al público general», afirmó la demanda emitida por el despacho Glancy Binkow & Goldberg.
Por su parte, la empresa dijo el miércoles que se defendería «enérgicamente» y refutó las acusaciones de inversores que demandaron a la empresa por su oferta inicial de acciones.
Una portavoz del portal explicó a la AFP que las acusaciones específicas mencionadas en una demanda colectiva depositada por The Brian Roffe Profit Sharing Plan y otros dos inversores contra el presidente de la compañía, Mark Zuckerberg, algunos directivos de la empresa y los bancos Morgan Stanley, Goldman Sachs y JPMorgan eran «infundadas».
Las acciones de Facebook se hundieron un 18% con respecto al valor de salida en las tres primeras jornadas de cotización, impulsando las acusaciones de que los grandes operadores institucionales habían recibido análisis privilegiados que los llevaron a vender sus colocaciones, mientras que los compradores minoristas pagaron el precio.
«La debacle de Facebook es percibida como un insulto por los pequeños inversionistas. Parece lo peor del bombo publicitario de Wall Street con un poco de triquiñuelas para empezar», estimó Dick Green de Briefing.com.
«Parece que los partícipes son los ganadores mientras que los inversores minoristas son los perdedores», agregó.
En tanto, el miércoles, las acciones repuntaban levemente en las operaciones de la mañana, con un avance de 2,1% a 31,66 dólares, pero todavía por debajo del precio de salida de 38 dólares, que generó grandes ganancias en el debut de la mayor red social del mundo.
Por su parte, el principal agente colocador, Morgan Stanley, se defendió este martes de las acusaciones, afirmando que había respetado todos los procedimientos habituales y legales.
La entidad destacó que los analistas de los bancos encargados del debut habían recortado sus perspectivas luego de recibir información de la propia empresa y que habían prevenido a todos los inversionistas.
Hay poca información sobre cuál es la postura de los agentes reguladores con respecto a este episodio.
«De ser ciertas, estas acusaciones son un asunto de preocupación para (las dos autoridades de regulación financiera) FINRA y la SEC», afirmó en un comunicado Rick Ketchum, presidente de la FINRA.