El economista y profesor de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), Gerardo Álvarez ofreció sus consideraciones en torno al crecimiento económico del 5.6% durante el primer trimestre de 2012.
A juicio del especialista, existen diferentes variables que promovieron el crecimiento de la economía, pero que dejan muchas interrogantes en cuanto al fortalecimiento del Producto Interno Bruto y su extensión en el tiempo.
Las posibles causas del crecimiento económico se fundamentan en el incremento del gasto público el cual aumentó en 28% comparado con el primer trimestre de 2011. Además, el incremento del 15% al salario mínimo aunado a las inversiones en las misiones sociales, reanimaron el consumo en 5.7%. «El crecimiento de una economía basado fundamentalmente en el incremento del gasto público no es sostenible en el tiempo, y mucho menos si esos niveles del gasto están asociados a una sola variable macroeconómica como lo es el petróleo».
En este sentido, Álvarez consideró riesgoso que la economía del país dependa de los precios del petróleo, los cuales han caído 8% en las últimas cuatro semanas, pasando de 113.58 dólares por barril a 104.66 dólares al 18 de mayo. «Podríamos decir que este resultado del PIB en el primer trimestre, estuvo apuntalado principalmente por la construcción pública que dio un salto de 29.6% asociado a los planes de Gobierno a través de la Gran Misión Vivienda».
En este contexto, el Banco Central de Venezuela (BCV) anunció un incremento de la demanda de obras de carácter residencial por parte del sector público las cuales aumentaron en 56%.
No obstante, la realidad fue muy distinta en el sector privado por cuanto la escasez de insumos básicos para la construcción afectó el desarrollo de nuevos proyectos residenciales y comerciales, aumentando considerablemente los índices de desempleo en el sector.
De acuerdo con cifras aportadas por el Sindicato de Trabajadores de la Construcción (Suticel), el desempleo en este campo supera el 80%. «La construcción privada ha venido disminuyendo en los últimos nueve trimestres de manera consecutiva por la falta de disponibilidad de insumos que ha repercutido en la ejecución de obras residenciales y no residenciales».
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La producción de alimentos en el país no abastece la demanda nacional, situación que ha promovido el incremento de las importaciones como único medio para evitar la escasez de productos básicos.
En este sentido, Álvarez señala que sólo en el sector alimentos se registró una caída del 7.4% en el primer trimestre del año, producto del incremento de costos de la materia prima y la insuficiencia de insumos para trabajar la tierra. «El Gobierno no menciona que esta situación se presenta a causa de las expropiaciones de fincas productivas, el incremento desmedido y muchas veces injustificado de la importación de alimentos, la nacionalización de empresas productoras de insumos agrícolas, entre otras medidas erradas».
Artículos como leche en polvo, azúcar, pollo, carne, arroz, maíz y café son importados por el ejecutivo nacional ante la inminente caída de la producción. «Si hablamos de la industria nacional o sector manufacturero, la situación es igualmente preocupante. Según cifras del INE citadas recientemente por el presidente de Fedecámaras, entre marzo de 2011 y marzo de 2012 han cerrado sus puertas cerca de 170 mil empresas, con más de 800 mil personas desempleadas las cuales han pasado a engrosar el trabajo informal donde actualmente existen más de seis millones de venezolanos».
Finalmente, el especialista concluyó que aunque la economía del país creció en términos nominales, no reales, lo hizo sobre bases nada sustentables y transitorias.
Afirmó que la contienda electoral marca la pauta en las decisiones económicas dejando al país frente a un destino inseguro.
Ante esta realidad la siguiente interrogante cobra mayor fuerza: ¿Cómo estará la economía del país después del 7 de octubre?.
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