El presidente francés, François Hollande, y el nuevo Gobierno encabezado por el primer ministro Jean-Marc Ayrault, acordaron este miércoles, durante el primer consejo de ministros, disminuirse el sueldo en un 30 por ciento.
La medida corresponde a una de las promesas que hizo Hollande durante su campaña electoral, y se une a la firma de un código deontológico dirigido a evitar el conflicto de intereses entre los miembros del nuevo Gobierno.
Ese código, cuyo contenido fue develado por el diario «Le Monde», incluye la renuncia a puestos ejecutivos que tuvieran antes de ascender al cargo, el rechazo de invitaciones privadas y regalos cuyo valor sea superior a los 150 euros, o la elección del tren como medio prioritario de transporte en desplazamientos inferiores a tres horas.
La primera reunión, según adelantaron algunos ministros a la salida del Palacio del Elíseo, fue «solemne y emocionante», en la que el presidente lanzó las consignas de «ejemplaridad» que espera del Ejecutivo durante su período de gobierno.
Hollande, según indicó la ministra de Vivienda, Cécile Duflot, les transmitió su determinación para aplicar sus promesas electorales y su voluntad de actuar, según añadió la titular de Deporte, Valérie Fourneyron, «sin perder el tiempo».