Bendito ser que en la creación,
eres dadora de vida. Y te tocó en
compensación tristezas y alegrías,
lágrimas y sonrisas, que cambian
día a día, defendiendo a tus hijos.
Así vas pasando la vida: para ti no
existe obstáculo, si un hijo te necesita ,
hasta la vida la ofreces.
No importa que esté marchita; unas
reciben un beso, otras una ingratitud:
y el tiempo no se detiene; ni la
mirada del señor. Aquel que todo lo
puede, aquel que da paz y amor:
Dichoso, quien la tiene viva, triste
Quien la tiene muerta: pero una madre
Siempre es madre, no importa dónde
se encuentre.