Al locutor y animador Luis Chataing le quedaron ganas de estar más cerca del público después de haber presentado 156 funciones de Ahora me toca a mí, por lo que ideó un nuevo guión llamado Si me permiten, con el que regresó a Barquisimeto.
En esta ocasión subió a las tablas del Teatro Juares, donde el público aplaudió de principio a fin sus comentarios y la especial dedicatoria que realizó a la recién fallecida actriz Lourdes Valera.
Este nuevo trabajo está apoyado en un producido material audiovisual en el que participan importantes personalidades del medio artístico venezolano, entre ellos Mariela Celis, Laureano Márquez, Luis Chataing, Claudio Nazoa y Emilio Lovera, con quien protagoniza -por estos días-, un nuevo éxito teatral llamado El Debate, en el que el escritor Leonardo Padrón funge como árbitro.
En esta ocasión, la preocupación de los artistas invitados al video es que Chataing ha perdido la inspiración, pero la verdad es que él no pierde oportunidad para bromear y reflexionar sobre asuntos cotidianos.
“Vengo llegando, créanme, qué interesante es trasladarse por la vía entre Morón y San Felipe, es todo oscuro”, dijo Chataing sin pasar por alto el mal estado de la vialidad y recordó que “Hay un camino”.
¡Desplazado!
En este unipersonal hubo tiempo para hablar, incluso, de tecnología. Chataing conversó sobre las redes sociales y recordó que era el tercer venezolano más seguido en Twitter -después del Presidente Chávez y de Ricardo Montaner- hasta que Gaby Espino lo superó “luego de poner una foto en bikini”.
Además, aseguró sentirse humillado por que los hackers no lo han tomado en cuenta para usurpar su identidad en Twitter.
A oscuras…
El comediante no pudo dejar pasar por alto el problema energético y justo en ese momento el teatro quedó a oscuras -simulando un corte de luz-, para que Chataing llevara a cabo su Plan B y se comunicara con el público a través de un megáfono.
De su infancia a la realidad actual
Además de recordar momentos de su niñez recordó haber crecido afanadamente con la única intención de no ser vestido por los gustos de su madre.
También bromeó sobre la música de Ricardo Arjona y sobre aquellos emblemas del país que han cambiado de nombre en el gobierno actual. Sus ganas de descansar en los aviones se sumaron a su opinión sobre “la especie diferente” que somos al entrar a los centros comerciales y otros temas que hicieron reír a los asistentes que disfrutaron de un Chataing sin máscaras.
Fotos: Emanuele Sorge
