Impulsar nuestros sueños

Las razones para impedir el logro de nuestros objetivos pueden ser múltiples. Cabe destacar entre ellas, falta de confianza en nuestras fortalezas, recursos y potencialidades. También puede ser, no hacer caso a nuestra intuición e inventar cualquier cantidad de obstáculos imaginarios y de prejuicios, en contra de lo que queremos.
En una oportunidad recuerdo que iba a realizar una diligencia. Cerca del lugar al cual debía dirigirme había una hermosa fuente, en la cual yo quería tomarme una foto. Pensé en llevarme mi cámara fotográfica. Sin embargo, paralelamente, empecé a ponerme cualquier cantidad de obstáculos imaginarios. Por ejemplo, que tal vez no encontraría a quién pedirle el favor para que me tomara la foto. Así mismo, me planteé que con los problemas de la inseguridad, quizás me podrían robar la cámara. En fin, que desistí de mi deseo. Resulta que cuando llegué al lugar, cuál es mi sorpresa que me encontré con uno de mis mejores amigos, que también es apasionado de la fotografía y podía haberme tomado una foto espectacular. Imagínense ustedes, en cuantas oportunidades, como ésta, actuamos y nos convertimos en nuestros propios enemigos para dejar de impulsar nuestros sueños.
Reflexionemos con la anécdota sobre esto y no permitamos que nos ocurra en nuestras vidas. La fuerza más poderosa para lograr nuestras metas, se encuentra en nuestra mente, en nuestro corazón, en nuestro accionar, sin dejar espacio para obstáculos de ningún tipo. Así, el universo conspirará poderosamente con nosotros.