El pasado 25 de abril fue el Día del Bioanalista, motivo por el cual la Dirección Regional de Salud organizó un acto para reconocer la labor de estos profesionales, según sus años de servicio, en el auditorio, con la presencia de Gloria Soler, coordinadora de programas y Renny Duque, coordinador regional de laboratorios.
Al comienzo hablaron sobre la vida de Rafael Rangel, padre de la parasitología y del bioanálisis en Venezuela, quien nació en la ciudad de Betijoque, estado Trujillo, un 25 de abril del año 1877.
Fueron más de 60 reconocimientos a bioanalistas con más de 30 años de labor ininterrumpida adscritos a esta dirección, junto a las medallas honoríficas que se impusieron a los profesionales con el mayor tiempo de servicio en el sector público.
Ellos fueron Pedro Guédez Estrella con 59 años de graduado, Caridad Barreto y Yenny Calderón por 51 años, Rafael Roa Brito con 42 años de graduado, así como Víctor Martínez y Nery Figueredo con 40 y 39 años de graduados respectivamente.
Además se hizo entrega formal de la reclasificación de cargos a más de 64 bioanalistas de la entidad como parte de los beneficios laborales que con el transcurso de los años se han adquirido, para finalizar con un pequeño agasajo y una sorpresa musical para culminar con la celebración.
¿Quién fue Rangel?
Rafael Rangel trabajó con el doctor José Gregorio Hernández, entre el 16 de agosto de 1899 y el 1 de abril de 1903, quien le enseñó las técnicas de la parasitología microscópica, la coloración de microbios, la elaboración de medios de cultivo, y la inoculación de gérmenes patógenos en animales de laboratorio.
Estos conocimientos facultaron a Rangel para recibir el nombramiento, el 18 de febrero de 1902, de jefe del Laboratorio de Histología y Bacteriología del Hospital Vargas, donde además de hacer los exámenes de rutina y ofrecer soluciones terapéuticas, desarrolló una corta pero fructífera carrera de investigación.