Hasta Fidel Castro demostró preocupación por el narcotráfico en nuestra institución militar, tal se confirma en la investigación que exigió -en toda amplitud del vocablo- al régimen que manda desde Cuba su hijo político, el paciente-impaciente-comandante-presidente (PICP).
Según primicia divulgada en artículo ¿Quién es Eladio Aponte? del general Carlos Julio Peñaloza, excomandante del Ejército, sucedió cuando el G2 (policía política) informó a Castro descubrimiento en puerto La Habana, de gigantesco cargamento de cocaína en bodegas de buque de la Armada, que zarpó de la Base de Puerto Cabello.
El desasosiego del dictador se incrementó al enterarse que el contacto de la remesa narcótica era el Capitán Jesús Aguilarte Gámez, quien en la Isla siguió tratamiento de desintoxicación por adicción a la citada droga. El año pasado, en una de las visitas del PICP a La Habana, apareció en el trasfondo del comité de recepción.
Dicho Capitán fue destituido por corrupción como gobernador de Apure. En este estado funcionaban 27 de 41 pistas de aterrizaje clandestinas destruidas en el 2011. Recientemente incautaron dos aeronaves usadas por el narcotráfico.
Según el comentario, entre los sospechosos por affaire del buque estaba el magistrado Eladio Aponte Aponte (EAA). Y eso condujo a su destitución, justificada sólo por entregar un carnet al capo Mackle, porque ya lo dijo el PICP, lo demás es un caliche (sin importancia)
Amenazado de muerte por militares, carteles y funcionarios del régimen, decidió salvar su pellejo huyendo a Costa Rica, donde prendió el ventilador con sus delatoras informaciones. La mafia del G2 y militares fracasó en intentó de secuestrarlo y a sabiendas de «lo que me espera no es nada bueno» resolvió entregarse a la DEA (Administración Federal de Drogas).
«Tras bastidores quedaba toda la inmundicia del barco sorprendido in fraganti en La Habana y otras menudencias donde era apenas un humilde miembro del reparto», comenta el General Peñaloza.
Temor tiene EAA a que le pase lo mismo que al nombrado Capitán quien fue asesinado a tiros en Maracay, el 24 de marzo. O que el «fusilamiento moral» expresión atribuida a Fiscal General, se concrete en el paredón cubano.
En julio de 1989 fue ejecutado por narcotráfico, delito de «alta traición a la Patria y a Revolución» el general Arnaldo Ochoa, junto con otros oficiales de la Revolución. El Ministro del Interior José Abrahante Fernández, fue asesinado en la cárcel.
Considerado el tercer Hombre más importante de Cuba; Miembro del Comité Central del PCC fue declarado Héroe de la Revolución. Formó parte de los catorce cubanos que secundaron a Luben Petkoff, en la incursión guerrillera por las falconianas playas de Chichiriviche.
Nota marginal: EAP se incorporó sin sueldo a Comisión Mixta para el Estudio de los Códigos Penal, de Justicia Militar y Orgánico Procesal Penal, que quien escribe presidía en Asamblea Nacional. Relevado de presidencia del Consejo de Guerra Permanente de Maracay, el exmagistrado nos pidió gestionar remuneración. Con sorpresa fue reclutado para Fiscalía Militar. Allí comenzó su desgracia.