Tu recuerdo siempre perdurará… A través de tu sonrisa, sincera y espontánea. Del brillo de tus ojos, que hablaban con las miradas y que demostraban el ser humano sensible y delicado que llevabas por dentro.
Karla a un año de tu partida, aún nos cuesta decirte adiós.
Estás en todas partes. Te podemos sentir a través de algunas de tus frases, ocurrentes, refrescantes a las cuales acompañabas con una carcajada o sonrisa.
Estás en la mano, aquella que nos apoyaba y también nos guiaba, cuando tus amigos te lo pedíamos y cuando sabías que lo necesitábamos. Inigualable al momento de escuchar y hacer silencio, los secretos en ti tenían a una aliada, y todos los que alguna vez te susurramos algún miedo, alegría, dolor o simplemente anécdota, somos testimonio de ello.
Apasionada con el quehacer periodístico. Comunicadora por profesión, vocación y oficio, la emoción la dejabas impresa en cada una de las palabras con las cuales hacías interesantes tus notas y reportajes, dejando una huella de excelencia en tu trabajo.
Comprometida con tu familia. Con tus tesoros, Sofía Victoria y Sebastián David, ella la luz de tus ojos y él el hombre de tu vida, por quienes entregabas todo. Tus sueños, tus energías, tus esperanzas eran y seguirán siendo ellos.
Con tu padre Jorge, ese hombre reflejo del trabajo al que adorabas porque todavía eras su niña mimada a quien él consentía. Con tu madre Elsy, quien te enseñó a no tenerle miedo a la vida con su ejemplo de voluntad y perseverancia. También con tu hermano Jorge Ernesto, tan distinto a ti, pero tan cercano a tu sentimiento, tan irremediablemente unidos y consolidados en una buena educación de principios y valores.
Hoy nos quedan esos recuerdos de ti, irrepetibles, tatuados en la mente y en el corazón de quienes te amamos. Karla, la palabra de Dios nos guiará por siempre, para encontrar el consuelo.
El evangelio según San Juan nos dice «Yo soy el camino, la verdad y la vida». Porque tú seguiste su sendero, entendiste su realidad y viviste según sus preceptos, sabemos que estás con Él, y que desde ese lugar seguirás por siempre acompañándonos.
