El laureado artista plástico Ramón Chirinos, hijo adoptivo de esta tierra crepuscular, inaugurará en Bogotá (Colombia) su nueva exposición individual. La cita será el venidero 3 de mayo enla Galería AlonsoArte del país vecino a las 7:30 de la noche. El creador, reconocido por sus incomparables y versátiles trazos cargados de tonalidades grisáceas y añiles irrumpirá el escenario plástico de Bogotá para conquistar con sus obras el terruño de Botero. Chirinos, postulado oficialmente para el Premio Nacional de Artes Plásticas 2012, fue seleccionado por Alonso Restrepo, director de la galería, con evidente satisfacción. “Cuando presentamos una muestra pictórica en la galería, me gustar contarle a nuestros amigos como llegamos a la selección de un nuevo artista… en esta ocasión me refiero a la presencia del maestro Ramón Chirinos, destacado artista de la plástica venezolana.. Estando en una Feria de Arte Internacional, la crítico de arte Bélgica Rodríguez, me presentó al maestro Chirinos y me dijo -quería que conocieras a Ramón, creo que es el tipo de pintura que pudiera interesarte-…”.
Así lo dejó expreso Restrepo en el texto del catálogo que nos facilitó el creador, natural del estado Falcón. Al escrito le sumó que el encuentro fue muy agradable. “Chirinos me obsequió un bello libro que muestra algunos de sus trabajos, me interesó mucho lo que vi y le pedí que me enviara algunas de sus obras para verlas directamente, me gustaron mucho más. Conversamos sobre la posibilidad para exponer en la galería y hoy estamos cumpliendo ese sueño”.
Las fantasías pictóricas de Chirinos
Bélgica Rodríguez en la crítica que realiza a la propuesta de Chirinos, cita a Piet Mondrian para referirse a la pintura del maestro que cuenta con una trayectoria de más de 30 años. “Uno de los ensayos de Piet Mondrian trata sobre la realidad natural y la realidad abstracta, dirigiendo ambos conceptos hacia la necesidad de crear una integración de las artes que pudiese combinar la espiritualidad universal con las propuestas modernistas encapsuladas en su teoría neo-plasticista. Si bien Mondrian es absolutamente geométrico-abstracto y Chirinos figurativo, hay conexiones plásticas que permiten ubicar la pintura de Chirinos en coordenadas ligadas a la realidad natural y a la realidad abstracta de la que habla Mondrian”.
Chirinos, continúa Rodríguez, detiene el tiempo en un presente que se hace eternidad en la imagen de la joven que, desplegando esplendoroso glamour femenino, sostiene una copa de vino. “Este hacer del presente una eternidad, para Mondrian corresponde a un absoluto logrado a través de las cuadrículas que dialogan en contrapuntos de armonías cromáticas”. Desde que comenzó a pintar, sostiene la crítico, Chirinos se ha caracterizado por un trazo suficientemente lírico y exquisito para expresar delicadas cargas poéticas.
Milita en lo moderno
Por otra parte, para el crítico de arte colombiano Germán Rubiano Caballero, Ramón Chirinos tiene un trabajo que milita en el arte moderno. “De acuerdo con un didáctico texto de Alfred Barr el término moderno ha adquirido una definición internacional… la obra moderna rompe definitivamente con la transmisión de la apariencia natural real… trasforma todos los datos en invención. Los cuadros de Chirinos tienen mucho en común, sobre todo por su manifestación de cambio, energía y vida… una manifestación que siempre resulta amable porque está finamente controlada por la armonía de colores y relación cuidadosa de los múltiples elementos de sus composiciones”.
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