Factores políticos integrantes de la Mesa de la Unidad Democrática en el estado Lara fijaron clara posición en cuanto a los violentos sucesos acaecidos en la capital de la República hace 10 años.
Macario González, vocero del sector adverso al oficialismo, en rueda de prensa, razonó que no hay razones para apoyar las actividades festivas promovidas desde el gobierno por estos días, con motivo de los 10 años de los hechos de abril de 2002.
“No hay razones para ningún tipo de fiestas, por el contrario, emplazamos a quienes ejercen función de poder a permitir se constituya en el país una comisión de la verdad, instancia reconocida en el derecho nacional e internacional”.
“Requerimos de una comisión integrada por personas imparciales, notables y con representación de países extranjeros amigos, que investigue y le digan a Venezuela, la verdad de lo registrado el pasado 11 de abril de 2002, para que se puedan sanar todas las heridas y podamos emprender un camino de unidad nacional como lo promueve hoy el candidato Henrique Capriles Radonski”. González dejó entrever que hasta la fecha hay dos versiones, la sostenida por el gobierno de un presunto golpe de Estado y la expuesta por la oposición sobre un vacío de poder por la renuncia del Presidente, anunciada por los medios de comunicación por el entonces inspector general de la Fuerza Armada Nacional, Lucas Rincón.
Lamentó las muertes de esos días, los heridos y la división de los venezolanos a partir de entonces.
“Al 11 de abril llegamos porque el Presidente de la República pretendió transgredir la Constitución a través de una Ley Habilitante mediante la cual impuso 39 leyes todas violadoras de la Carta Manga y del derecho a la propiedad”.
Fue el propio Chávez, detalló, quien creó un ambiente de inestabilidad política en el país, acompañado del despido de casi 20 mil trabajadores de Pdvsa.
Gesta de civismo
En sus declaraciones expuso que hace 10 años no existía la Mesa de la Unidad y lo que hubo fue una reacción de la sociedad civil a la cual calificó de gesta impecable de civismo y de reclamo de los venezolanos para que se restituyera el sistema democrático violado desde Miraflores.
Al hacer un recuento de los sucesos, el profesional del derecho llamó al sector oficial a revisar la historia y sacar conclusiones para evitar se repitan hechos que enlutan y causan heridas graves a la sociedad. Es necesario, redundó, crear una comisión de la verdad como la constituida en Chile, El Salvador o Brasil. Además indicó que los oficialistas mienten cuando asumen que el 11 de abril se materializó un golpe de Estado. Lo que hubo fue una gesta cívica que logró la renuncia del Presidente, concluyó al admitir que el 12 se produjo una ruptura del hilo constitucional por decisión unilateral de Carmona Estanga, hecho que condenó.
Foto: Daniel Arrieta