{gallery}Galeria/2012/04/titanic{/gallery}
El presidente irlandés Michael D. Higgins encabezó el miércoles el homenaje a las víctimas del «Titanic» en la ciudad de Cobh, donde el lujoso transatlántico hizo su última escala antes de hundirse en el Atlántico Norte en la madrugada del 15 de abril de 1912.
De los 123 emigrantes irlandeses que se embarcaron en ese puerto del sur de Irlanda, que entonces se llamaba Queenstown, 79 figuraron entre los más de 1.500 muertos en el naufragio.
Irlanda registraba entonces una segunda ola de emigración hacia Estados Unidos, tras una primera provocada por porla Gran Hambruna de los años 1840, recordó Higgins.
«Entre 1830 y 1914, se estima que cinco millones de irlandesas partieron hacia Norteamérica para no volver nunca», declaró en Cobh, que conmemora el desastre con varios acontecimientos durante toda la semana.
El presidente irlandés comparó el naufragio del «Titanic» a la situación económica de su país. «Nosotros también en nuestra época hemos experimentado el tipo de crisis que ocurre cuando algo considerado insumergible -en nuestro caso una economía especulativa– se va a pique no sólo por las circunstancias y los errores sino también por los delirios de grandeza», dijo.
A finales de 2010, Irlanda, al borde de la bancarrota debido a los problemas de su sector bancario, tuvo que firmar un plan de rescate de 85.000 millones de euros (114.000 millones de dólares) conla UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un duro plan de ajuste.
El mandatario se refirió a un jesuita irlandés, el padre Frank Browne, que se bajó del «Titanic» en Cobh.
«Tras embarcar en Southampton para un trayecto inicialmente previsto hasta Queenstown, entabló amistad a bordo con un rico matrimonio estadounidense que le ofreció pagarle el billete hasta Nueva York», explicó Higgins.
«Pidió a su jerarquía si podía continuar su viaje a América pero recibió una lacónica respuesta por telex –‘Baja de ese barco»– y eso probablemente le salvó la vida», continuó.
Además, pudo salvar también las fotografías que realizó del barco y de sus pasajeros durante los días que pasó a bordo, recogidas en un libro titulado «Titanic in Photographs» con ocasión del centenario del naufragio.
Lea también: Nueva York también rinde homenaje a las víctimas del hundimiento del Titanic
Restos del Titanic estarán protegidos por la Unesco
100 años después: El ‘Titanic’ es una atracción
Fotos: AP/Reuters