En la situación provocada en Monagas, el régimen recurre al Prócer de la Independencia cuyo nombre le dieron en 1909 al estado nororiental, para reivindicar su actuación negativa. Fue el general José Tadeo Monagas, quien acaudilló el nepotismo que se dejó sentir desde la Presidencia de la República durante 23 años (1847-1870, los primeros once continuos).
Identificado ideológicamente con Carlos Marx, el vigente régimen invoca su cita de que la historia se repite por lo menos dos veces. Pero obvia la observación: primero como tragedia, y segundo como farsa».
En su mandato el paladín nacido en la Tumba de los Tiranos, tal bautizó Simón Bolívar a Maturín, tuvo hechos positivos en su gestión. Entre ellos la abolición de la esclavitud y de la pena capital por delitos políticos; un gobierno que al principio resultó tranquilo y amistoso con oligarcas y conservadores y el respeto a la Libertad de Imprenta.
Además de pretender ser vitalicio Jefe de Estado, el 24 de enero 1848 su régimen impulsó con milicias el asalto al Congreso con saldo 8 muertes, entre ellas 4 diputados y Santos Michelena, quien fuera presidente provisional. Siguió con autoritarismo e imposición de personalidad.
Vencido su primer período comenzó la hegemonía monaguense, al imponer elección de su hermano José Gregorio, (1851-1855). Este le devolvió la Presidencia para el segundo período de 4 años a culminar en 1859. Pero en el afán de perpetuarse en el mando promovió la reforma constitucional en 1857 a fin de elevar el período a 6 años. Implantó la tristemente célebre frase: la Constitución sirve para todo.
El malestar causó rebeliones que causaron su renuncia el 15 de marzo de 1858 y solicitó asilo que le fue concedido en la Legación de Francia. Retornó en 1864 y transitoriamente se dedicó a la agricultura en su pueblo natal. En 1868 encabezó la denominada Revolución Azul que desde Barcelona logró tomar a Caracas el 25 de julio, derrocando al presidente Juan Crisóstomo Falcón.
A finales de ese año se celebraron comicios y José Tadeo fue elegido presidente a la edad de 83 años. Murió sin haberse posesionado y le sucedió su hijo, general José Ruperto Monagas quien había sido escogido como primer designado a la presidencia. En 1870 resultó ganador en nuevas elecciones, pero no fue ratificado por el Parlamento, como correspondía.
José Tadeo Monagas se proyectó históricamente desde 1813 cuando se incorporó a la lucha por la Independencia y participó en las principales batallas.
Figuró entre los más destacados jefes de caballería. El Libertador lo designó Primera Lanza de Venezuela y le otorgó ascenso a General de División.
Hoy el Estado homónimo es gobernado por José Gregorio Briceño, apodado el Gato, por lo cual recobra vigencia la dinastía llamada Monagato.
NOTA MARGINAL: Nuevas elecciones se plantean en el Colegio Nacional de Periodistas, el gremio más embestido oficialmente, con rojo saldo jamás registrado en la historia y de atropellos en nombre del socialismo a las garantías constitucionales más amplias del derecho a la información. La defensa es el reto de las autoridades a elegir.