“La empresa velará por mantener un sistema de gestión de la seguridad operacional del más alto nivel, en constante revisión y mejoramiento y que promueva constantemente la práctica de la seguridad”.
Aunque eso es lo que sostiene la aerolínea estatal venezolana Conviasa en su sitio web, la Unión Europea (UE) prohibió que utilice su espacio aéreo “debido a numerosos problemas de seguridad derivados de accidentes y de los resultados de los controles en pista en los aeropuertos de la UE”.
La decisión fue tomada de forma unánime por el Comité de Seguridad Aérea (formado por representantes de los 27 países miembros, Croacia, Noruega, Islandia, Suiza y la Agencia Europea de Seguridad Aérea).
En la práctica la medida sólo afecta el vuelo que Conviasa tiene a Madrid, pero pone un manto de dudas sobre la seguridad en las otras frecuencias de la aerolínea –que opera 14 destinos nacionales y diez internacionales– y parece echar por tierra las aspiraciones, que en algún momento tuvo el presidente Hugo Chávez, de convertir a la firma en la aerolínea bandera de América Latina.
El gobierno rechazó la decisión de la UE al considerarla “totalmente desproporcionada” y contraria a “las consideraciones hechas por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) sobre las condiciones de operación segura de la aeronáutica civil venezolana”.
Las autoridades aseguraron estar evaluando “medidas recíprocas y proporcionadas” para “preservar sus intereses fundamentales y salvaguardar el prestigio que la línea aérea estatal tiene”.
La sanción
Otras dos compañías venezolanas, Estellar Latinoamérica y Aerotuy, se mantienen sometidas a “un control reforzado”, aunque “no se considera necesario tomar medidas por el momento”, indicó la Comisión Europea.
En la lista negra a la que fue sumada Conviasa, la UE también agregó este martes a las aerolíneas de Libia.
“La seguridad es prioritaria. No podemos transigir en este a?mbito en absoluto. Si tenemos pruebas dentro o fuera de la Unión Europea de que las compañías aéreas no operan con seguridad, debemos actuar para garantizar que no exista ningún riesgo a este respecto”, dijo el comisario europeo de Transporte, Siim Kallas.
Kallas señaló que bloque no va a “escatimar esfuerzos” para ayudar a los países implicados a superar sus dificultades en materia de seguridad.
Son 279 las compañías, de 21 países, que tienen prohibido operar en la UE. Entre ellos se encuentran aerolíneas de Afganistán, Benín, República del Congo, Guinea Ecuatorial, Sudán y Zambia. Y en América Latina, Honduras y Suriname también tienen empresas vetadas para volar en el bloque.
Desde Conviasa se aseguró a BBC Mundo que “por el momento los vuelos a Madrid se mantienen operativos” y dijeron desconocer otra información sobre la prohibición de la UE.
Percances y retrasos
Conviasa fue creada en 2004 por el gobierno como aerolínea de bandera, que había perdido años antes cuando Venezolana de Aviación (Viasa), fuera vendida a la española Iberia y finalmente se fuera a quiebra en 1997.
Entre los venezolanos es conocida por sus percances técnicos, constantes retrasos y cancelaciones. La semana pasada un vuelo a Madrid salió de Caracas 30 horas más tarde.
Con una flota de 18 aeronaves, Chávez anunció en enero planes de expansión de la aerolínea y dijo que se iban a adquirir 20 aviones a la brasileña Embraer y cuatro Airbus usados de Emiratos Árabes Unidos con el objetivo de ampliar los destinos nacionales e internacionales.
Sin embargo, expertos de la industria aeronáutica consultados por BBC Mundo aseguran que la prohibición no era del todo inesperada.
“No puede sorprender si conoces lo que ocurre. Conviasa tiene muchos inconvenientes, serios problemas, para el cumplimiento de rutas, no tiene suficientes aeronaves, fallas en el flujo de repuestos que produce retrasos naturales, hay inconvenientes que afectan el mantenimiento”, asegura Enrique Cuervo, coordinador de Rescate Humboldt, una organización que se especializa en la investigación de accidentes aéreos.
Es que la situación de seguridad en los cielos venezolanos dista de ser la ideal.
¿Controles rigurosos?
“En Venezuela los controles no parecen ser lo suficientemente rigurosos”, le dice a BBC Mundo William Dugarte, asesor y representante legal de víctimas de accidentes aéreos en América Latina, entre ellos el que Conviasa sufrió en septiembre de 2010 cuando murieron 17 personas en las cercanías de Puerto Ordaz.
Apenas dos días después, otro avión de la aerolínea aterrizó de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía en Caracas a raíz de una falsa alarma de fuego en un motor.
Esos incidentes hicieron que la aerolínea suspendiera sus operaciones durante dos semanas para revisar sus protocolos de seguridad.
“Conviasa es una empresa que ha tenido seis presidentes en dos años, ahí hay un tema estructural de organización y eso tiene incidencia directa en las políticas de seguridad de la empresa”, opina Dugarte.
El año pasado en Venezuela se registraron 27 incidentes aéreos y 35 accidentes, según cifras oficiales de la Dirección General para la Prevención e Investigación de Accidentes Aéreos, aunque la organización Rescate Humboldt asegura que fueron 252 y 44, respectivamente.
De acuerdo a la OACI, un accidente implica que una persona sufra lesiones mortales o graves o que la aeronave experimente daños estructurales mientras que un incidente implica todo suceso relacionado con la utilización de una aeronave, que no llegue a ser un accidente.
Conviasa sufrió el año pasado 40 “eventos y fallas”, según cifras del Instituto Aeronáutico de Aviación Civil que BBC Mundo pudo conocer. Sólo dos de las 11 aerolíneas venezolanas contempladas en ese estudio tuvieron un peor registro.
Los destinos de Conviasa
Conviasa asegura volar a 14 destinos nacionales y 10 internacionales. Aunque a través de su página web solamente se pueden adquirir boletos para los vuelos nacionales y a ocho de los internacionales: Bogotá, Buenos Aires, Dominica, Grenada, Madrid, Puerto España y San Vicente. Los vuelos a Damasco y Guayaquil no aparecen como disponibles.
Las inquietudes a nivel mundial en cuanto a la seguridad de las flotas venezolanos no son nuevas.
Recién en 2006, tras más de una década, la Administración de Aviación Federal de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) elevó la clasificación de seguridad operacional de Venezuela a categoría 1 lo que permitió que las aerolíneas venezolanas vuelen a EE.UU. utilizando sus propios equipos y tripulaciones.
Pero los problemas no sólo atañen a la aviación civil. En los últimos ocho meses se reportaron al menos cinco accidentes con aeronaves de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en los que murieron 20 personas.
El último ocurrió la semana pasada.
El sueño de la integración
“La flota aérea de Venezuela tiene muchos años; por eso es necesario actualizarla y modernizarla, y así ofrecer un servicio de calidad a nuestros usuarios”, reconoció este lunes la ministra de Transporte Aéreo y Acuático, Elsa Gutiérrez.
“La flota es bastante antigua”, asegura Cuervo”. “Hay aviones que tienen 30 años, lo ideal es que los aviones no pasen de 15 años, hay que renovarlos, hay que ir progresando”.
En ese sentido, el gobierno aprobó el lunes US$500 millones para la la compra anunciada por Chávez en enero dando muestras de que, al menos en los papeles, los planes de extensión se mantienen.
El gobierno ve a Conviasa como un “instrumento para la integración”, así lo aseguró en agosto del año pasado, en ocasión del vuelo inaugural de la ruta Caracas-Guayaquil, el presidente de la aerolínea, Jesús Viñas.
“La herramienta para la integración son estas aeronaves, que el Estado venezolano impulsa como primer paso a un sueño, que es tener una compañía grannacional de aviación, con bandera suramericana”, agregó.
