Luis Alfredo Pérez (25) conocido como “Chorobobo”, era del área de media y el segundo del pran.
Este joven llevaba seis años dentro de la cárcel por el delito de homicidio y desde que llegó al penal se instaló en una celda y en ella murió.
Era una persona que nunca soltaba su arma de fuego. Acostumbraba a dormir con ella, siempre formó parte del “carro”, es decir, estaba entre los líderes. Los mismos internos dicen que era el que más respetaba la rutina y manifiestan que su muerte ocurrió por el descontrol que existe ahora, y más cuando las mujeres del anexo están ligadas nuevamente con los privados de libertad masculinos.
Sobre la muerte de “Chorobobo” existe tres versiones: la primera de ella es que durante la visita que se llevó a cabo el miércoles a un hombre apodado “El Carotero” se le escapó un tiro, el cual pegó en una de las infraestructuras. Por la acción, saltaron fragmentos de piedras que impactaron en la cara a una visitante.
Con la excusa de que la visita es intocable fueron a reclamarle al reo, pero “Chorobobo”, en calidad de pran, se metió para defenderlo, pues había sido accidental.
Se enfrentó a quien reclamó y pidió enfrentarse en el coliseo, pero aparentemente esa persona lo traicionó y prefirió matarlo mientras dormía con el consentimiento del jefe del área.
“El Carotero” tuvo que ser sacado del penal, pues su vida estaba corriendo peligro.
La segunda versión que se indicó es que una mujer llamada “Chela” había sido apartada hace tiempo por faltar a sus normas y como era amiga de “Chorobobo” le dijeron que él sería responsable si ella regresaba.
La mujer regresó y el joven pagó con su vida. Aunque también muchos alegaron que el segundo del pran, quería organizar un atentado en contra del Edwin “El Gordo”, máximo líder.
Lo cierto es que este hombre se convirtió en el reo número 19 en ser asesinado dentro del penal, en dos semanas recobraría su libertad porque ya le salía beneficio, había pagado la mitad de su pena.
“Chorobobo” presintió que algo le pasaría, pero dijo que moriría con las botas puestas. Con su muerte queda un varón de tres años y una hembrita de tan solo un añito.
En Quíbor
A las 8:40 de la noche del miércoles, de múltiples disparos, fue asesinado Wualinton Altamirano Parra Mendoza (18). El hecho ocurrió en la calle principal del sector El Hato de Quíbor, municipio Jiménez.
Foto: Dedwison Álvarez