En la actualidad los edulcorantes son una excelente opción para reducir la cantidad de calorías de un alimento. Adicionalmente, no producen caries debido a que no aportan sustancias que puedan ser fermentadas por las bacterias de la boca y no producen los ácidos que inducen la formación de la caries. Y además, representan una excelente alternativa para las personas con Diabetes
Cuando hay diabetes, no significa que no se puede comer dulces. Las personas con diabetes pueden comer postres preparados con edulcorantes de manera que su nivel de glucosa (azúcar) en la sangre esté dentro de los parámetros normales.
Sugerencias de consumo:
Lo primero que se debe tomar en cuenta antes de comenzar a incorporar los edulcorantes a la alimentación diaria, es comprobar si está aprobado actualmente por la FDA (Federación Internacional de Alimentos) de los Estados Unidos de América, tomando en cuenta que la mayoría de estos productos son importados.
Asimismo, las personas que se encuentran en regímenes alimenticios especiales, pueden aplicar algunas de estas sustancias artificiales para «aliviar» los sabores, por ejemplo en un café negro; también en aquellos casos de personas que sufren alguna patología en la cual no pueden utilizar azúcares simples, deben consultar primero a su médico especialista para que les ofrezca las mejores recomendaciones y no alteren el control de la glicemia.
En el caso de los pequeños de la casa se pueden ir educando para que obtengan el azúcar de las fuentes naturales como las frutas, los carbohidratos y los vegetales. En el caso de un jugo de naranja o de limón, se puede utilizar el azúcar para aliviar el ácido de la fruta pero si es una fruta de por sí dulce, no es necesario.
Cualquiera que sea el caso, lo más recomendable es consultar un especialista antes de iniciar el consumo de estas sustancias que sustituyen en gran medida el sabor original del azúcar.
