Es la primera vez que la tragedia toca la puerta de la familia Colina Pérez. En horas de la noche del jueves les dieron la mala noticia de que habían asesinado a uno de sus seres queridos en la avenida principal de Ruiz Pineda, entre calles 7 y 8 del oeste de la ciudad, parroquia Juan de Villegas.
Se trataba de Richard José Colina Pérez (25). Su cuerpo estaba tirado en un puesto de comida rápida. Había sido asesinado por un hombre que se acercó con un arma en la mano y le disparó en cuatro oportunidades en el pecho y una en la cabeza. La vida de Colina Pérez se extinguió en un abrir y cerrar de ojos.
Pedro Colina cuenta que su hermano terminó de trabajar a las 9:30 de la noche. La víctima, quien desde hace cinco años se desempeñaba como taxista, guardó su vehículo en su residencia en Villa Productiva y sacó su motocicleta. Tras recibir una llamada telefónica de una dama decidió ir hasta Ruiz Pineda.
Esa mujer que lo llamó se encontraba junto a él en el mo-mento que fue asesinado pero la misma se perdió y abandonó al joven en el lugar.
La víctima era el cuarto de seis hermanos y con su muerte quedan dos niñas huérfanas una de 9 y 2 años. Seres queridos del taxista aseguran que no tenía problemas, ni enemigos, esperan que el Cicpc San Juan indaguen qué fue lo que ocurrió.
Lo matan a golpe
Pedro Rafael Torcate (60) residía en el sector 2 del barrio La Peña, era caletero de Mercabar y ganaba un buen dinero. Delia Marchán cuenta que cada vez que cobraba se iba a tomar en la licorería y cuando se pasaba de tragos, era víctima del hampa.
Esto mismo fue lo que le pasó a Torcate el sábado 10 de marzo, en la licorería de Nuevo Barrio la señora Marchán lo encontró golpeado. Tenía una contusión en el cuello, en la espalda y ambas piernas.
Por su estado fue recluido en el Antonio María Pineda en donde falleció a las 8:30 de la mañana de ayer.
Foto: Daniel Arrieta