Además de las funciones básicas, comida, sexo y religión, nada despreciables por cierto. Nunca es tarde para más. No nos quedemos allí. Tres manifestaciones del ser humano, al término de su accionar en la vida. Por supuesto, mal entendidas , algunas veces dos, y otra recurrente, para evitar que muera de hambre o por deshidratación.
La tercera edad al contrario; Nunca es tarde. Es la edad de oro del ser humano. Vivir este período es vivirla con dignidad, hemos recorrido, a Dios gracias, gran parte de los caminos que habrán de recorrer nuestros hijos y nietos. Pues bien, sirvámosle de guía efectiva, verdaderos orientadores para el camino que tienen por delante. Sabemos por demás que la comprensión a nuestros jóvenes, no es fácil pero es determinante en los momentos actuales donde la inseguridad de todo tipo está a la orden del día. Por un lado nos reiteran -“No me fastidien”, por el otro; – “No lo aguanto”.
Una cosa es cierta; Negar que no sienten afecto sería una exageración. Los queremos de nuestro lado, con respeto pero debemos ser más comprensivos, porque si bien es cierto que nosotros vivimos sus etapas de infancia, adolescencia y adultez, y que de cualquier manera hemos sido protagonistas del desarrollo que ha tenido nuestra sociedad, eran con otros matices. Debemos reconocerlo de esa forma y nuestros jóvenes de igual manera.
Los jóvenes tienen la iniciativa pero los adultos la experiencia. Nos faltarían páginas para enumerar las virtudes de cada uno. Pero ese no es el caso.
El fin de este artículo es motivar a los adultos mayores a continuar siendo proactivos. Existen múltiples actividades que podemos realizar. Permítanme sugerir algunas que con seguridad nos hará sentir mayor seguridad y útil a la hora de orientar, la llevaremos con satisfacción y seremos sin duda el orgullo del grupo familiar.
-La lectura nos lleva a salir de la ignorancia, al tiempo que sirvamos de punto de apoyo a nuestros hijos en sus quehaceres escolares. El internet es una herramienta fundamental. Aprendamos a utilizarla.
-Aprender a tocar algún instrumento musical y lograr un cumpleaños feliz, en familia nos convertiría aún más orgullosos de nuestro adulto mayor, más tomados en cuenta por nuestra fuerza de voluntad y ganas de vivir con dignidad.
-Escribir. Realizar borradores de nuestras páginas del tiempo y capítulos para muchos cerrados, pero que su contenido, por su sabiduría y prudencia, nunca pasará de moda.
-Hacer deporte. El que no pueda correr, trota; El que no pueda trotar, camina. Los discapacitados no tienen problema porque Dios con seguridad les dio otros dones, con los cuales cumplir la misión para el cual fueron encomendados.
Vivir en abundancia es evitar el abandono y las depresiones inútiles.
Paso página…