El segundo día de huelga de hambre y protesta de un grupo de desalojados el pasado domingo del cono de seguridad del aeropuerto de Barquisimeto, se llevó a cabo este jueves en la plaza La Justicia, frente a los tribunales de la región.
Pese a que el miércoles se informó que eran cinco las personas que iniciaban el ayuno, ayer había únicamente dos mujeres, familiares directos del grupo de detenidos durante la revuelta de esta semana en el salón de sesiones del Palacio Municipal.
Las dos damas, tendidas en colchonetas, arropadas con banderas de Venezuela y sin pronunciar palabra, son Mayendi Vásquez y María Gil.
“Responsabilizamos a Amalia Sáez, Luis Reyes Reyes y al comandante Hugo Chávez por lo que le pueda pasar a las dos mujeres en huelga de hambre y a Carlos Sieveres durante su tiempo privado de libertad”, dijo Henry Arriechi, miembro del Frente Alberto Lovera de la UPEL y también del grupo FRIO.
Hasta ahora, dijo, no se ha recibido ninguna respuesta de parte de los organismos con competencia en materia de vivienda. Además, las autoridades han criminalizado la lucha que llevamos adelante.
Los huelguistas tomaron la determinación de mantenerse en pie de lucha por varias razones. Primero para rechazar la forma en la que funcionarios de la Guardia Nacional actuaron en el desalojo de los terrenos del cono de seguridad del aeropuerto, a quienes acusan de haber empleado la fuerza y violado los Derechos Humanos de los ocupante; segundo, para exigir políticas eficientes del gobierno en materia habitacional; tercero por la supuesta herida de puñal sufrida por un menor de edad del grupo de detenidos que fue trasladado hacia el retén de El Manzano, Pablo Herrera Campins; y finalmente para rechazar la detención de un grupo de 12 personas afectas al grupo FRIO, entre ellos Carlos Sieveres.
“Estamos protegiendo nuestra lucha por la emancipación del pueblo en defensa de la tierra. Convocamos a un debate abierto público”, añadió Arriechi.
La medida de presión inició el miércoles al pie de la estatua ecuestre del Libertador, frente al Palacio Municipal. Pero el jueves “nos vinimos a la plaza de La Justicia porque el pueblo nunca será engañado”.
Muestran pancartas, escuchan música revolucionaria y se guarecen del sol dentro de una carpa improvisada. “Este tipo de medidas generan en el pueblo un despertar. Poco a poco se irán sumando más personas a la huelga de hambre”.
Los manifestantes denunciaron tortura y falta de información por parte de las autoridades responsables, especialmente en el tema de las causas de privación de libertad de los doce “camaradas” que permanecían hasta ayer, antes de la audiencia preliminar, tras las rejas.
El vocero del grupo FRIO aseguró que la lucha llegará hasta sus últimas consecuencias. Se mantendrán tras la búsqueda de una vivienda propia, al tiempo que rechazan el artículo 471-A del Código Penal que define la ocupación ilegal como un delito ya que lo consideran derogado públicamente por el presidente Chávez, pese a su vigencia dentro del instrumento legal.
Fotos: Ricardo Marapacuto