Víctima de Padre Diego salió a presentarse en tribunales

Con un disparo en la cabeza con entrada y salida fue encontrado el cuerpo de un joven en el sector Piedra Colorada del caserío Padre Diego, ubicado hacia la carretera vieja de Carora. El muchacho estaba maniatado con las propias trenzas de sus zapatos y cuando su cadáver fue levantado por el Cicpc no presentaba identificación alguna.
A las 11 de la noche del mismo martes, a la morgue del Hospital Central, llegaron familiares de Ronal Alexander Martínez Rivero (23), buscándolo porque se encontraba desaparecido desde las 9 de la mañana que había salido al Edificio Nacional, porque debía presentarse ante los tribunales y al entrar constataron que el cuerpo localizado en Padre Diego, era de su ser querido.
La víctima residía en el sector Santa Teresa de Pavia. Actualmente trabajaba en una empresa como obrero, pues debía mantener a su hijo varón de un año y a su esposa, quien tiene 4 meses de gestación.
Martínez Rivero fue apresado el 13 de enero del 2010 por funcionarios del Cicpc de la subdelegación San Juan, por el delito de droga y a los seis días le otorgaron un beneficio de presentación de cada 15 días. En esa ocasión los investigadores lo señalaron de ser uno de los cabecillas de la banda «Los Mechupas», sindicados sus integrantes de ser los autores de la mayoría de homicidios y robos en Pavia.
Lo extorsionaban
Familiares de la víctima, que no quisieron identificarse por temor a posibles atentados contra su vida e integridad, indicaron que a raíz de esa detención, los funcionarios de los diversos cuerpos de seguridad del estado, pasaban por su casa a molestarlo. Se habían dado a la tarea de pedirle dinero, bajo la amenaza de no detenerlo. «El Gobierno siempre lo acosaba e inclusive sospechamos que fueron ellos, porque ayer se recibió una llamada en donde pedían 60 mil bolívares, para devolverlo», confesaron sus seres queridos.
Las investigaciones de este caso la llevan los sabuesos del Cicpc San Juan y serán ellos los encargados de esclarecer e investigar este crimen.
Ultimado en La Carucieña
A las 10:30 de la noche, Jean Carlos Ocanto (22), quien se ganaba la vida como electricista fue baleado en la urbanización La Carucieña. Un impacto en la mano derecha y otro en la región pectoral le quitó la vida.
La víctima fatal residía en la calle 15 con avenida 4 de La Carucieña y según relató su vecino Víctor Vizcaya, fue un sujeto en una moto quien le disparó. El cuerpo detectivesco maneja este caso, como un ajuste de cuentas.
 
Foto: Emanuele Sorge