La CIDH dictó medidas cautelares a favor de dos estudiantes venezolanos, Lorent Saleh y Gerardo Carrero, presos en el Sebin por considerar que están en riesgo «sus derechos a la vida, salud e integridad personal», informó hoy el organismo.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) informó en un comunicado de que este lunes solicitó al Estado de Venezuela la adopción de medidas en favor de Saleh y Carrero, al determinar que «se encuentran en una situación de gravedad y urgencia».
«La Comisión solicitó al Estado de Venezuela que adopte las medidas necesarias para preservar la vida e integridad personal de Lorent Saleh y Gerardo Carrero, proporcionando la atención médica adecuada de acuerdo a las condiciones de sus patologías», señaló el organismo en un comunicado.
Instó, además, a Venezuela a que «asegure que las condiciones de detención de Lorent Saleh y Gerardo Carrero se adecúen a estándares internacionales, tomando en consideración su estado de salud actual; y que concierte las medidas a adoptarse con los beneficiarios y sus representantes».
Según la CIDH, Saleh y Guerrero «estarían ubicados en un sótano (cinco pisos bajo tierra), conocido como ‘la tumba’, del edificio que funciona como sede principal del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN)».
Allí, son sometidos a un «aislamiento prolongado sin contacto con otras personas, en un espacio confinado de 2×3 metros, con cámaras de vídeo y micrófonos en cada una de sus celdas, sin acceso a la luz del sol o al aire libre», indicó la CIDH en un documento oficial.
Los dos presos han denunciado que padecen «crisis nerviosas, problemas estomacales, diarrea, vómitos, espasmos, dolores en articulaciones, dolores de cabeza, dermatitis, ataques de pánico, trastornos musculares y desorientación temporal» sin «presuntamente recibir atención médica adecuada», añadió la Comisión.
El Gobierno de Venezuela tiene 15 días para informar a la CIDH sobre la adopción de las medidas solicitadas.