Los cierres de operaciones de empresas con una gran trayectoria nacional, arrecia la cosecha de tempestades sembrada por el gobierno nacional contra la propiedad, la iniciativa privada y la inversión extranjera, asegura el Centro de Divulgación del Conocimiento Económico (Cedice-Libertad), al fijar posición, en un comunicado, en torno a esta preocupante situación.
La institución hace referencia a los casos recientes de Colgate-Palmolive, empresa con una tradición de 74 años de permanencia en el país; General Motors, con 69 años de servicio; Pirelli, proveedora tradicional de cauchos con 26 años en el mercado venezolano; y, United Airlines, octava línea aérea en marcharse del país.
Cedice Libertad expresa la necesidad, en estos momentos de profunda conmoción política, de que el gobierno nacional debe emprender un camino que preserve la propiedad privada, el Estado de Derecho y la libertad económica como fundamentos insustituibles de la existencia de una sociedad democrática.
Fanny Migliore, investigadora del Observatorio de Derechos de Propiedad de Cedice Libertad, afirma que el cierre y la reducción de la actividad productora, industrial y de servicios, ocasionarán una pérdida considerable de oportunidades de laborales para la población venezolana, afectando su productividad y calidad de vida.
Las razones para los cierres de operaciones se unen en una tormenta perfecta: régimen de control cambiario e irrespeto a la propiedad privada.
Las estadísticas son fatídicas y expresan el trasfondo de la tragedia que viven las familias venezolanas. Por una parte, por la escasez de medicamentos, con la condena al cierre de más de una centena de laboratorios, lo que ha causado miles de muertes. Y, aunado a eso, la carencia de implementos para el transporte, que llegará a extremos con el cese de actividades de Pirelli.
-Esto afectará indefectiblemente las condiciones de vida de toda la población, incluyendo a la trabajadora que depende del transporte público para asistir a sus zonas de trabajo»,asegura Migliore.