El director del Hospital de Pediatría Agustín Zubillaga (Hupaz) de Barquisimeto, Rafael Agüero, anunció que en los próximos 15 días funcionarán los cinco quirófanos del centro asistencial que está bajo su responsabilidad, los cuales estuvieron paralizados casi en su totalidad durante parte importante del 2016 y lo que va de 2017.
En la actualidad solo funcionan dos. Uno fue restaurado este martes y, a raíz de ello, reanudaron las operaciones electivas en el Hupaz. En cada pabellón intervienen aproximadamente a 10 niños por día.
Para la rehabilitación de los quirófanos, según declaró a EL IMPULSO, hacen falta los aires acondicionados que supuestamente ya adquirió la Gobernación de Lara. Espera que sean trasladados de Maracaibo, estado Zulia, hacia la capital larense para proceder a instalarlos.
Agüero explicó que la planta eléctrica del Hupaz no sirve. La edificación del hospital tiene problemas de impermeabilización que impiden que sean utilizados 25 espacios del quinto piso por filtraciones.
El área de oncología infantil está completamente deteriorada y el laboratorio está sin reactivos ni equipos para los exámenes. La mañana de este martes se dañó la máquina de rayos X.
En general hay problemas de Iluminación, las tuberías de agua potable y aguas servidas están en mal estado y la cava principal de los alimentos está averiada.
“Nos encontramos un hospital inhumano y drásticamente deteriorado, con un déficit de personal y una escasa cantidad de material médico quirúrgico (…) Las necesidades de urgencia ya las estamos resolviendo. Vamos progresivamente y poco a poco. No todo depende de mí, ni de la Gobernación de Lara, ni de la Dirección de Salud, ni del Ministerio de Salud; también depende de los ciudadanos que tienen que tener conciencia y cuidar”, manifestó.
El galeno aseveró que le dieron 100 días para resolver los problemas. Por ello reubicaron de primera mano a los niños hospitalizados en los pasillos y ya asignaron 32 enfermeras para Emergencia, Terapia Intensiva y Quirófano.
“Nos han aportado los recursos con colaboración del Ministerio de Salud (…) Ya nos están llegando antibióticos y ya vamos a comenzar a reactivar la farmacia”, afirmó.
A su juicio, las críticas condiciones en las que encontró el Pediátrico obedecen al abandono. Las antiguas autoridades alegaron falta de recursos y la crisis del sector salud a nivel nacional.
“Lo que hicieron los demás a mí no me importa. Indudablemente tengo que pedir explicaciones y ya lo estoy haciendo; estoy esperando respuestas”, dijo al respecto.
Agüero contó que comenzó en la Ucla como profesor de farmacología básica y clínica en el año 1995, posteriormente se especializó en anestesiología y coordinó durante 10 años el postgrado de anestesiología.
Desde hace dos años es el coordinador de Postgrado del decanato de Ciencias de la Salud y dijo ser el profesor más joven en llegar al escalafón de titular en dicha casa de estudios a sus 42 años de edad (2006).
“Tengo una identificación con el Pediátrico porque como coordinador de posgrados hacíamos una fiesta infantil. Después de siete años seguidos dejamos de hacerla por situaciones que no quiero comentar; pero Dios quiera y la Virgen lo volvamos a hacer este año”, acotó.
Asimismo, sobre la polémica que generaron las fotos que publica en sus redes sociales dijo:
“Mientras yo no le haga daño a nadie, creo que estoy haciendo las cosas bien.
La autoridad no se ejerce con fotos, sino con acciones. Indudablemente soy una persona que baila pero no soy el único que lo hace.
Que yo sepa uno va a la playa y a la piscina en traje de baño.
Yo no voy a estar en un quirófano dando anestesia en traje de baño. Nunca me van a ver así en el hospital.
Yo soy un ser humano normal.
La gente tiene problemas mentales de autoaceptación y si hay algo en la vida, es que yo estoy bien aceptado”.