De acuerdo con un informe desarrollado por Amnistía internacional, en Venezuela se ha encontrado una “manera fácil” de obtener divisas y es a través de la explotación minera, sin embargo esta actividad se ha realizado sin los debidos estudios ambientales, los cuales traerán consecuencias en los próximos años.
En el país hay alrededor de 112 mil kilómetros cuadrados de terreno que contiene oro, bauxita, cobre, diamante, entre otros. Dimensiones similares a la longitud que poseen países como Portugal o Panamá.
La ingeniera Yezenia Frontado, activista de la organización no gubernamental VITALIS, señala que en este caso en particular “no existe evidencia de la realización de estudios de impacto ambiental o sociocultural en la zona”.
Las consecuencias que conlleva la falta de estos estudios es la de cambios en la vegetación, climáticos, desviación de ríos, así como también efectos contaminantes en el agua y en los animales.
Esto afecta de manera negativa la economía y recursos del país, el cual ya ha pasado por esta situación que se traduce en la fuerte sequía y los múltiples racionamientos de electricidad a nivel nacional.
No obstante, debido a esta falta de estudios al suelo, quienes también se ven afectado por otros efectos son las poblaciones indígenas, a quienes aseguran que se les violan los Derechos Humanos.
Según la normativa nacional e internacional, para la explotación minera, las empresas que se dedican a estas actividades, deben contar con el consentimiento de estas comunidades, cosa que no se cumple.
La directora de investigación y desarrollo de Provita, Tina Oliveira, indicó que “desde el punto de vista de los derechos de los pueblos originarios, como también se les nombra en algunos documentos, la declaración de la Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco viola y desconoce derechos reconocidos en nuestra legislación”, debido a que no se les tomó en cuenta para este proyecto ni se les dio a conocer en qué consiste la obra.
Como conclusión del informe, es necesario que antes de continuar con la explotación minera en el país, realizar los estudios sobre impacto ambiental requeridos para evitar golpes económicos a futuro.