La herencia que recibió Yuyita de Chiossone por parte del General Juan Bautista Rodríguez, con una vivienda en pleno casco histórico de Barquisimeto en la calle 24 con carrera 16, hoy la coloca en situación de alto riesgo como ella misma lo cataloga “a un tilín de caerse”.
Quienes conocen del tema, saben que el deterioro del casco histórico no es nuevo, sólo que la temporada de lluvia ha hecho retornar los temores de las familias que habitan en estas viviendas, pues el derrumbe de una de ellas, podría provocar el mismo efecto en las casas contiguas de toda la cuadra.
Ante este panorama, es inevitable pensar que unas estructuras que datan del año 1860 a 1870, fueron construidas con excelentes bases, pues pese a la falta de mantenimiento adecuado, aún se sostienen.
Para Yuyita con una combinación de adobe, caña brava, madera, barro y una mano de obra especializada, mucho se puede hacer para preservar la conservación de su domicilio. En días pasados, una oficio se le hizo llegar a la sede de los tribunales dirigido al Poder Judicial, dada la preocupación que se cierne por el sitio de descanso y de espera, en el cual se ha convertido el frente de estas casas para los familiares de los detenidos, que allí esperan conocer las decisiones judiciales sobre sus seres queridos.
“Esperamos que el Poder Judicial tome sus medidas y evite una tragedia, porque incluso son madres que amamantan a sus hijos, y las paredes pueden ceder en cualquier momento.
Este viernes se realizó una reunión por parte de un grupo de historiadores para evaluar el desarrollo de actividades de tradición como es el caso del Ateneo y el Centro de Historia Larense, aspirando que con el deterioro no dejen de practicar allí diversas actividades.
Falta de recursos
Chiossone informó que el Instituto Municipal de la Vivienda, ha dispuesto atender la revitalización del casco histórico. Las personas a cargo de los trabajos de reparación de los inmuebles no han seguido adelante por falta de recursos asignados por la alcaldía para comenzar los trabajos; aunque iniciaron los trabajos por su cuenta no pudieron seguir.
“La contratista comenzó los trabajos, horadaron las paredes para poner unas bases muy importantes y así el agua no siga permeando,, pero ahora fue peor el remedio que la enfermedad, porque al quitar las protecciones que tenían, se desprendió una pared”, explicó.
Dijo que para el día lunes esperan gestionar una demolición de las paredes internas de la casa, y así contrarrestar el riesgo de afectar las otras viviendas.
– No creo que esa pared soporte cuatro días más, mientras llegan los materiales, y vuelven los obreros, espero que se evite un hecho lamentable.
