A las 9:30 de la mañana sonó el timbre, el cual alertaba a los 435 alumnos del Colegio Pablo VI, sobre una desastre natural. En la teoría del simulacro, se trataba de un terremoto de 5.6 grados, con epicentro entre la población de Santa Rosa y Palavecino con 56 kilómetros de profundidad. En un escenario de esta naturaleza, afectaría la estructura de la institución que tiene tres pisos.
Los pequeños se ubicaron debajo de mesas y marcos de las puertas y una vez que dieron el aviso fueron saliendo con las manos en la cabeza uno a uno. El desalojo duró tres minutos con seis segundos.
La acción simuló dos personas atrapadas y una herida tras la explosión.
Los alumnos fueron llevados hasta el parque Pablo VI, ubicado frente a la institución, que es un área abierta y no había peligro.
Fueron 50 funcionarios de Protección Civil quienes participaron en la emergencia.
La hermana Dolores, con sus 85 años de edad y problemas motores, aceptó participar. La sacaron en su silla de ruedas. Para la “lesionada” se necesitó usar un camión tipo pluma. Un funcionario se encargó del traslado.
El coronel Héctor Vargas, director de Protección Civil en Lara, indicó que esta práctica respondió al Ejercicio Internacional de Alerta de Tsunami, Caribe Wave 2015, que ayer se realizó en diferentes regiones del país.
En Lara por no ser zona costera sino sísmica, simularon el terremoto. Además de Iribarren, hubo prácticas en Jiménez, Morán, Crespo y Torres.
Vargas indicó que dicha actividad está enmarcada en el Plan 360 y el Programa de Respuesta Inmediata (PRI) de la Gobernación del estado Lara y tienen previsto que se realice al menos una vez al mes en una institución educativa, para sembrar la cultura de la prevención.
Tembló en Carora
A las 8:39 de la mañana de ayer, se registró un sismo de 3.4 grados, con una profundidad de 5.0 kilómetros y su epicentro fue a 25 kilómetros al sureste de la población de Carora.
