¿Se puede o no ingerir licor si se padeció el chikunguña? ¿Por cuánto tiempo debe evitarse el consumo de alcohol etílico? ¿Debe mantenerse o evitarse el tratamiento para la diabetes, hipertensión u otras patologías? ¿Puede pintarse o decolorarse el cabello? ¿Es dengue o chikunguña?
Estas interrogantes se las plantean las personas que padecen el virus, el cual aqueja a buena parte de la población venezolana desde mediados de 2014. Aunque parezcan dudas simples, persiste la incertidumbre producto del desconocimiento.
A propósito, vale recordar que la enfermedad es transmitida por el mosquito Aedes aegypti. A diferencia del dengue, existe una sola forma de presentación. En el caso del dengue se trata de una patología con cuatro formas de presentación.
No beba
Si padeció recientemente la enfermedad no ingiera licor durante uno o dos meses, así lo advirtieron los doctores Ruy Medina, director del Hospital Central Antonio María Pineda, y Belkis Ramos, jefa de la Emergencia del referido centro asistencial.
-¿Es cierto que luego de padecer el chikunguña la persona no puede tomar licor? Se le consultó a Medina.
-Aunque científicamente no está comprobado que exista alguna relación entre el chikunguña y el alcohol, el virus produce cierto grado de inflamación hepática. El alcohol se metaboliza en el hígado. Otro dato muy importante es que para tratar la enfermedad utilizamos el acetaminofén, el cual es hepatotóxico, por lo cual debe tomarse cada seis u ocho horas. Hay gente que se sobredosifica, eso produce daño hepático. Si se está enfermo o sufrió recientemente la enfermedad que afecta parte general del organismo, la recomendación es no beber y esperar uno o dos meses.
-¿Qué inflamaciones produce el virus?
-Produce inflamaciones diferentes. Nosotros contabilizamos dos muertos por encefalitis, es posible que el chikunguña bajó las defensas del organismo en esas personas o inflamó las meninges, lo que facilitó la presencia de esas bacterias que comúnmente viven en el organismo para mantener el equilibrio pero que atacan cuando bajan las defensas. La recomendación es esperar dos meses para consumir licor y tratarse con acetaminofén con prescripción médica. No tomarse dos pastillas cada vez que se tiene fiebre porque es hepatotóxico.
-¿Cuáles son las características principales del chikunguña; qué lo diferencian del dengue?
-La única diferencia marcada que tiene es que produce un sarpullido de aparición brusca y muy extenso. También los dolores poliarticulares durante mucho tiempo. El dengue produce un dolor generalizado. El chikunguña se centra en las articulaciones.
-¿Es posible alguna reacción con ciertos químicos. Puede una persona teñirse el cabello?
-Sí, eso no tiene nada que ver. Lo ideal es que la persona se recupere.
-Cuando existe una patología de base como la diabetes, la hipertensión, artritis, problemas bronquiales, ¿debe mantenerse el tratamiento?
-El chikunguña baja las defensas, por lo cual hay que cuidarse mucho más. El diabético tiene que cumplir con su dieta estrictamente, colocarse su insulina y su medicación, el hipertenso tampoco puede dejar de tomarse su pastilla. Vigilar que los abuelitos respiren bien y expectoren para que no se genere una neumonía viral y se complique con una neumonía bacteriana. Los pacientes con mayor riesgo son los abuelos, los bebés y quienes presenten una enfermedad de base.
-¿Cómo están las estadísticas, han subido o disminuido los casos?
-Hay muchos pacientes con chikunguña, sin embargo, tienden a disminuir. Estas personas entran por la Emergencia, los ven y los devuelven a sus casas con el tratamiento, sólo se hospitalizan los más afectados. También tenemos casos de dengue.
Tratarse con responsabilidad
La doctora Belkis Ramos coincide con Ruy Medina en torno a la disminución de los casos, evitar el consumo de alcohol por dos meses y medicarse el acetaminofén con responsabilidad.
“Vienen menos pacientes con chikunguña. Los que más se acercan son personas de la tercera edad. La gente joven guarda reposo en casa y toma el acetaminofén”.
Respecto al consumo de alcohol sí se debe esperar, dijo la jefa de la Emergencia.
“Cuando se padece un proceso viral puede haber hepatoesplenomegalia debido al virus. En vista de la fiebre y los dolores articulares se toma acetaminofén que puede producir hepatotoxicidad. El hígado está recibiendo bastante acetaminofén y el ingerir alcohol puede producir insuficiencia hepática. Nosotros recomendamos beber luego de uno o dos meses. No puede pasar un virus y beber a la semana siguiente. Muchas personas han tomado conciencia”.
El acetaminofén es hepatotóxico, reiteró, no se puede tomar cada cuatro horas, sino cada seis horas, y sólo 500 mg. El paracetamol (1.000mg) cada 12 horas.
Los pacientes con mayor riesgo son los diabéticos, hipertensos, enfermos renales y aquellos con artritis reumatoidea o lupus. El chikunguña exacerba los síntomas por causar un síndrome febril poliarticular.
“Observamos que el virus manda a la cama a los abuelos; son los pacientes quienes se hospitalizan”.
Ramos indicó que ningún paciente con determinada enfermedad de base puede dejar de lado su tratamiento, de lo contrario puede empeorar. Debe permanecer el control.
“Aunque son muy parecidos el dengue y el chikunguña, éste produce mayor toque del estado articular y el paciente se encorva, le cuesta caminar, se presenta inflamación de las rodillas, los tobillos y los dedos de las manos. Las plaquetas por lo general se mantienen a menos que presente los dos virus, puede ocurrir”.
El dolor en las articulaciones puede llegar a durar toda la vida.
“La etapa aguda es de cinco días. Ya un porcentaje alto de la población lo ha padecido por lo cual creemos que estamos pasando la etapa más fuerte”.
La recomendación es no beber en exceso y perder el control como ser humano.
Acetaminofen
El doctor Enrique Ruiz Chacin, médico internista, de la especialidad Neuroinmunofarmacología y profesor de la UCLA, en un material para EL IMPULSO explicó que del acetaminofén puede esperarse dos efectos positivos: bajar la fiebre y aliviar los dolores y uno negativo: efecto tóxico contra el hígado. Tanto así que se piensa que algunas muertes atribuidas al dengue hemorrágico fueron debidas en realidad a insuficiencia hepática (donde se producen los factores de coagulación), por efecto tóxico del acetaminofén.
En un informe suministrado por el doctor se conoció que es a partir de 1966 que se ha descrito la presencia de hepatotoxicidad posterior a la administración de dosis única elevada o de dosis ligeramente supraterapeúticas repetidas.
La educación y recomendaciones del médico juegan un papel especial en la prevención de sobredosis de acetaminofén, que puede resultar fatal en los casos de insuficiencias hepáticas.
Lo ideal es no automedicarse, acudir al médico en caso de presentar los síntomas del chikunguña y tratarse con la dosis de acetaminofén que recomiende el médico.
Algunas complicaciones renales y hepáticas surgen al combinar altas dosis de acetaminofén con medicamentos como metformina, glucofage y atorvastatina.
