Calles desoladas, santamarías abajo y poco tráfico marcaron el Viernes Santo de Barquisimeto.
Esquinas solitarias y templos repletos. Así transcurrió el segundo día feriado de la ciudad usualmente congestionada.
Nuevamente, el barquisimetano prefirió quedarse en casa, visitar los centros comerciales o destinos más cercanos como el montañoso Cubiro.
Cuadras transitadas a diario lucían vacías ayer. Fue el caso del centro donde se anuló la actividad comercial. Pero las colas en las farmacias de turno no se redujeron. La búsqueda de medicamentos escasos continuó durante el día libre.
Normalidad en el Aeropuerto
La jornada en el Aeropuerto Internacional Jacinto Lara marchó con normalidad. El servicio de atención al ciudadano recibió pocas denuncias por pérdidas de equipaje o irregularidades.
Allá se realiza un operativo con la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socio Económicos y la Defensoría del Pueblo.