Cada vez son menos las opciones para los pacientes con insuficiencia renal que necesitan recibir hemodiálisis.
Desde hace años, la Fundación Amigos del Paciente Renal, Fundaprel, habría denunciado la escasa cantidad de unidades de diálisis en el estado para cubrir la demanda de los pacientes que ameritan este tratamiento para poder sobrevivir.
Hace pocos días, la Unidad de Hemodiálisis de la Policlínica de Barquisimeto fue cerrada. La misma venía presentando serios inconvenientes para poder atender a los pacientes debido al deterioro de las máquinas, la falta de mantenimiento, la imposibilidad de conseguir los repuestos para poder rehabilitarlas y poder reactivar los servicios, quedándose poco a poco sin máquinas para las diálisis.
Alrededor de 80 pacientes se han visto afectados con esta situación al perder su unidad de diálisis. Mientras tanto, en el estado Lara unos 1.500 pacientes renales necesitan este tratamiento que se realiza sólo en 8 centros, en su mayoría localizados en Barquisimeto. El 40% de los pacientes debe trasladarse de municipios vecinos.
Daniel Colmenares, presidente de Fundaprel, precisó que son ciudadanos que requieren someterse a hemodiálisis por tratarse principalmente de pacientes del tipo positivo, es decir, que han sufrido otras enfermedades contagiosas y su atención debe ser especial, más rigurosa que los negativos.
Pero estas dificultades también se vienen presentando en otras unidades de la entidad, en las cuales se disminuyen las horas de diálisis para poder atender a una mayor cantidad de pacientes y no forzar tanto las máquinas.
“El proceso de desintoxicación no es completo y los pacientes terminan complicándose”.
A ello se suma la falta de medicamentos para los tratamientos del paciente renal, como la Vitamina B12 y el calcio que han desaparecido del mercado.
“Son medicamentos que ayudan a mantener fuerte el sistema óseo del paciente renal que de tanto recibir la diálisis se debilitan. No conseguirlos es grave, porque es un tratamiento estricto que no puede detenerse”.
Tampoco los medicamentos para el control de la hipertensión u la diabetes se encuentran.
“Los hipertensivos, no se consiguen, y los medicamentos de los diabéticos glucofage e insulinas no llegan. Buscan en las farmacias y no encuentran. La mayor cantidad de pacientes en diálisis están en esas condiciones a consecuencia de estas dos enfermedades crónicas”.
Asimismo, los insumos para las diálisis han fallado. “Se necesitan tres garrafas de líquido por tratamiento, el cual es importado. Los filtros de diálisis lo da el Seguro Social y hasta la fecha no han faltado, pero en ocasiones se presentan problemas porque los insumos llegan al puerto y la nacionalización no se hace de manera inmediata”.
