REFLEXIONES EN POSITIVO – Bebé delincuente

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Me acerqué a la cuna de un bebé, hijo de una amiga, para conocerlo y aparte de ver lo bello que era como todo niño (con sus ojitos y sus manitas), me empezó a manifestar sus inquietudes, comenzando por decirme que por inocente ya había tenido que estar en un retén sin ser culpable de nada. Luego pasó a decirme que cómo era posible, a su edad, estar obligado por diferentes motivos y con muchos culpables, a convertirse en  la materialización de la comisión de muchísimos delitos puesto que para alimentarse terminaba siendo quien se constituía en aquello de “aprovechamiento de productos provenientes del delito”, y hacía esa relación en la cadena para que sus padres le llevasen ese producto vital.
Mire señores, el que tiene una vaquita en este país para aprovechar su leche tiene que ser un mago, un ingeniero por su ingenio y un corrupto, porque hay que ver cómo le cuesta movilizar ese animal, alimentarlo, mantenerlo saludable y manejarlo para su propósito rentable; para movilizarlo una guía, para trasladar su alimentación otra guía, para conseguir su medicina ni que escribir y luego para aprovechar su leche sea como quesos y otros productos muchas más guías y todo esto  no tiene otro final que lo que muchos adultos resuelven con corrupción, de tal manera que cuando mi papá me trae el biberón con buena o mala leche para su aprovechamiento es decir, alimentarme, no tengo otra alternativa que aceptar y considerarme delincuente.
A confesión de parte relevo de pruebas y tal vez por eso no ha venido la policía a buscarme, no se ha nombrado ningún fiscal especial para investigar a esa banda de delincuencia organizada que maneja esta situación y tal vez sea porque no hay la cantidad de organizaciones de seguridad ni de fiscales para cubrir la demanda de tanta investigación de bebés- delincuentes.
Luego, con el  transcurrir de mis años y al crecer,  las exigencias me dicen que debo necesitar de pollo, carne, arroz, pescados, pastas… que pasan por estar controlados por restricciones, lo cual me vn a obligar a seguir siendo delincuente.
Mire señor escriba que estoy preocupado por mi futuro. Sé que no me pueden investigar porque no tengo ni la cédula de identidad ni el pasaporte, si para sacar la cédula en un futuro cercano me es muy difícil. Tal vez invente mi doble nacionalidad y luego para sacar el pasaporte y lograr con ello aprovechar los dólares preferenciales de viajeros raspa cupos, buscaré la forma del dueño de la vaquita es decir, me las ingeniaré, trataré en lo posible de no ir al programa Fénix, establecido por la delincuencia formal puesto que, me considero en la delincuencia informal y aproveche usted en estas reflexiones de decirle a los adultos de hoy que mi gran preocupación es llegar a adulto y tener que comportarme como delincuente porque no se  permite trabajar honradamente.
Los ojitos de este bebé y su mirada es como un interrogatorio. Siguen las preocupaciones: ustedes los adultos están claros que queremos conquistar en beneficio de la niñez y el país y también nos dicen que no existen misiones imposibles siempre y cuando sepas por dónde empezar y nunca es tarde cuando hay voluntad, por medio de la unión corregir todas las anomalías que nos ha cambiado la vida con pasos propios y visión clara, voluntad para crear en la cultura de la paz y así responderle con orgullo las inquietudes de este bebé.
..Unidos todos por el éxito y el crecimiento de la familia ganadera (Fedenaga)….
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