Un ambiente tenso y hostil se vive en las calles y avenidas del municipio Palavecino, donde cientos de escombros y destrozos muestran la intensa polarización reflejada en el país. Vecinos de distintas urbanizaciones reclaman estar desprotegidos, a merced de la represión por parte de efectivos militares y de actos violentos vinculados con presuntos colectivos armados.
EL IMPULSO recorrió diversas zonas donde se escenificaron los principales focos de protesta durante el pasado viernes, a fin de constatar la versión de los palavecinenses.
En la urbanización Valle Hondo, se reportaron casos de supuestas violaciones a inmuebles privados. Según la versión de sus habitantes, un contingente antimotín de la Guardia Nacional Bolivariana irrumpió en algunos hogares de la quinta etapa.
“Estábamos protestando de forma pacífica en la avenida El Placer, en las afueras de la urbanización, cuando aproximadamente a las 10 de la mañana, un contingente de la Guardia nos reprimió violentamente; la acción produjo que nos resguardáramos en nuestras casas, pero los efectivos nos persiguieron y lanzaron bombas lacrimógenas dentro de nuestros hogares, sin importar que ahí estaban niños y ancianos”, relató Rómulo Marín.
El ciudadano reportó que una señora de 97 años, presentó un cuadro de asfixia a causa de la inhalación de los gases químicos.
Declaró que las escenas se repitieron en la noche, aunque con menor intensidad.
“Exigimos respeto a nuestras propiedades, acá vivimos personas responsables que protestan de forma pacífica y tienen como armas las banderas y las cacerolas en función de expresar un descontento por las políticas públicas del Estado”, señaló la ciudadana Noemí Hernández.
Daños en Las Mercedes
A pocas calles de Valle Hondo, está la urbanización Las Mercedes, donde sus vecinos informaron que fueron víctimas de ataques perpetrados por “colectivos de paz” y efectivos castrenses.
En esa zona, gran parte de los destrozos se evidenciaron en la panadería San Benito, cuya fachada fue destruida por presuntos grupos armados.
“En horas de la tarde, grupos violentos apoyados por efectivos militares, reprimieron nuestra concentración con bombas lacrimógenas y perdigones. Luego de corrernos, empezaron a lanzar piedras y rompieron vidrios de la panadería”, expuso Johana Velásquez.
Posterior al ataque, la joven indicó que fueron amenazados por los efectivos militares, a objeto de generar miedo y zozobra.
También, se pulsó la opinión de algunos habitantes de la zona, quienes rechazaron la obstaculización de arteriales viales importantes, tal como es el caso de la encrucijada que conecta la urbanización Las Mercedes con Valle Hondo y la avenida Intercomunal Barquisimeto Cabudare, tramo esencial que comunica a los ciudadanos desde su hogar hasta sus puestos de trabajo.
El Trigal y El Paraíso con barricadas
Numerosas barricadas realizadas con escombros y troncos de árboles, estaban dispuestas a lo largo de las calles de estos complejos habitacionales, los cuales dificultaban el acceso de los vehículos que transitaban por ambos urbanismos. Sin embargo horas de la mañana, la municipalidad desplegó personal de limpieza en la zona.
La Morenera trancada
Todos los accesos que comunican diversas urbanizaciones de la parroquia José Gregorio Bastidas con la comunidad de La Morenera permanecen cerrados, puesto que sus habitantes establecieron una gran barricada con la excusa de defenderse en contra de colectivos armados que asechan la zona en horas nocturnas. En esta zona, está un semáforo caído, según versión de los vecinos, una tanqueta que quiso sortear los escombros golpeó directamente la base del poste.