Ayer en la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda estaban los familiares y amigos de Yasneudy Alvarado Briceño, de 42 años, quien murió a las 9:30 p.m., aproximadamente del domingo, luego de que el viernes recibiera una descarga de escopeta.
Quienes la conocieron están enfundados en el dolor por la pérdida de la dama. Aún incrédulo de lo ocurrido, su sobrino, Yander Orozco, denunció que hubo “negligencia médica, por eso murió mi tía. Aquí la prioridad es el dinero. La vida de cada ser humano, se convierte en nada después que pasa la puerta de la emergencia”.
Indicó que se trata de una estafa lo que ocurre en el Hcamp. “Esto se ha convertido en un negocio, en corrupción. Es una partida de personas que no deberían ejercer esa carrera de médicos con el respeto de aquellos que lo merecen. Hay quienes opacan la profesión”.
Confesó que durante los tres días de hospitalización de su tía, gastaron más de 20 mil bolívares en medicamentos. “Cuando llegan aquí al hospital se olvidan que son humanos y los tratan como a un animal. Le pidieron muchas medicinas e implementos como un catéter que no se conseguía”.
Comentó que el domingo, a las 5:30 p.m, una doctora les dijo que los hacía responsables de lo que ocurriera porque se necesitaba con urgencia y le manifestaron que producto de la escasez no lo hallaban, por lo que les canalizó con el conductor de una ambulancia. “Normalmente cuesta entre 1.500 a 3.000 bolívares, pero ella nos los vendió en seis mil. Aceptamos por la emergencia, y al rato llegó el producto”.
Narró que dos horas después fue cuando se lo colocaron, “porque ellos estaban estudiando en su hora de trabajo. Teníamos que esperar que se desocuparan porque estaban en su puesto de trabajo los tres médicos de guardia. De hecho tuve una discusión con ellos y a las 9:30 p.m., aproximadamente falleció”.
Explicó que desde un principio les informaron que estaba grave de salud por los órganos vitales que le perforaron los perdigones, entre ellos el corazón y el hígado.
Durante los días de su estadía en el Hcamp, la subieron al área de cirugía de mujer. Estuvo en la cama 11, aún no entienden por qué la mantenían ahí si estaba de gravedad.
El suceso
Yasneudy Alvarado, de 42 años, quedó herida por una descarga de escopeta el pasado viernes, luego de ser víctima de una discusión entre sus vecinos, quienes al accionar el arma la impactaron. Los perdigones se le introdujeron en varios órganos vitales por lo que permaneció hospitalizada hasta el domingo en la noche, cuando perdió la batalla y murió.
El sobrino de la víctima, Yander Orozco, narró que el viernes, su tía junto al esposo arribaban a su hogar cuando fueron interceptados por su vecino, Iván García, quien les preguntó por Pastor Antonio Argüello González, de 28 años, conocido como El Negro. Lo buscaba porque supuestamente le había pegado a su hijo de 11 años.
La pareja le dijo desconocer el paradero de Argüello, por lo que García se dio media vuelta para buscarlo, pero el esposo de la dama vio que andaba armado, por lo que intentó mediar, pero en ese instante El Negro venía de frente y entablaron una discusión que terminó en golpes.
El hijo mayor de Iván García, llegó al sector Las Torres de Los Venezolanos Primero en El Tostao y se metió en la pelea. “En medio de la riña hubo una detonación y es ahí cuando mi tía (Alvarado Briceño) se le acerca al esposo y le dice que la hirieron. Rápidamente la llevaron hasta el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) del barrio El Bolívar y de ahí remitida a la Emergencia del Hcamp”.
En el suceso también resultó lesionado con perdigones en el pecho, Argüello González.
Enardecidos por lo ocurrido, quemaron el rancho del presunto homicida, Iván García, quien se dio a la fuga tras cometer el hecho.
