Dulce Lucena, era la madre de José Miguel Lucena Mambel, de 27 años. El pasado 26 de julio conoció la noticia que le cambiaría la vida, pues mataron a su hijo a las 10:30 p.m.
La dama está desesperada, no dará descanso hsta ver preso nuevamente a quien supuestamente, cometió el atroz crimen, en el que pudieron haber otras personas asesinadas.
“En Venezuela no hay justicia, sólo para los que tienen plata”; esgrimé la señora Dulce Lucena, quien cada vez que recuerda a su retoño, se va en lágrimas.
A su hijo, lo mataron cuando se encontraba dentro de una tasca en Cerritos Blancos, al oeste de Barquisimeto, ese día, el dueño del establecimiento, decidió cerrar y no permitirle la entrada a unos sujetos.
Éstos llenos de valor por cargar unas armas de fuego, golpearon la puerta y como no les abrieron, cuentan los testigos, que dispararon por las ventanas del lugar, momento en el que inició una revuelta, todos intentaron escapar de los proyectiles pero uno de eso, perforó en la humanidad de la lamentable, víctima.
A las horas, los funcionarios de la policía regional que fueron al sitio por las llamadas que recibieron, capturaron a un sujeto de nombre Cristobal Daniel Hurtado Sánchez, de 21 años, quien presuntamente cometió el crimen.
Según la madre del hoy occiso, en la fiscalía segunda del Ministerio Público, no ha llegado nada y lo dejaron en libertad a pesar que Polilara lo detuvo con unas armas de fuego”.
El que la ayudaba
José Miguel Lucena Mambel, era el mayor de los cinco hijos de Dulce Lucena. Trabajaba como obrero en una empresa desde hacía 10 años y con cuyas ganancias, ayudaba a su progenitora para el sustento del hogar.
“Yo espero que hagan justicia porque no es justo que algunas personas andan como locos echando tiros”.
El ahora occiso, dejó una hija de ocho años, quien vivía con él, puesto que la madre, se la entregó y no veló más por la menor. “Eran muy pegados, ahora tengo que cuidarla yo.
Ella crecerá sin su padre a su lado por culpa de esos delincuentes”.
