Representantes de la Asociación de Frigoríficos y Carnicerías en el estado Lara (Asofrica), se reunieron con directivos del Matadero Industrial de Centroccidente a fin de solucionar el problema de la distribución de carne regulada en la región.
Marilyn Unda, presidenta de Asofrica, indicó que establecieron reuniones con el matadero, a fin de comprender la situación que afrontan ambos sectores, con la regulación de la carne.
Sin embargo, según los carniceros, la industria expresó que tampoco cuentan con carne regulada.
Cabe recordar que el día jueves, se instaló una comisión mediadora del Concejo Municipal de Iribarren, a fin de reunirse con funcionarios del Indepabis y analizar la cadena de distribución.
“Estamos despachando bien, pero no nos llega la carne regulada. Nos han estado atacando diciendo que somos unos ladrones y especuladores. Las fiscalizaciones las cumplimos, pero después nos llegaron con multas que llegaban a 500 unidades tributarias”.
A pérdida
Unda expresó que el negocio de venta de carne regulada ha traído pérdidas millonarias al sector.
“Nadie trabaja para perder, la carne está regulada a casi 18 bolívares pero a nosotros nos llega a 55 bolívares. Entonces preguntamos: ¿donde está la ganancia?”. Consideró que la fiscalización debe estar orientada a los grandes productores para después.
Sin embargo, expresó la total disposición de conversar con los organismos competentes, a fin de llegar a una solución. Mientras tanto, los carniceros no venderán los productos regulados, aunque seguirán con la santamarías abiertas para ofrecer lo demás rubros a la población.
En Asofrica existen 480 negocios agremiados en el estado Lara, de los cuales 300 fueron sancionados.
Reunión con Indepabis
El día lunes, Asofrica se reunirá en la capital con Eduardo Samán, presidente del Indepabis.
Planteará la situación por la cual atraviesa, en espera de conseguir una solución definitiva.
El atún es más caro que un kilo de carne
Simón Rodríguez, dueño de una carnicería y vocero de Asofrica, expresó que cómo puede existir la posibilidad que un kilo de carne cueste 27 bolívares mientras que una lata de atún llegue a costar 40 bolívares.
“Queremos que nos dejen trabajar, no vamos a vender carne hasta que se solvente la situación, nos genera pérdidas millonarias”, expresó.
De acuerdo a su experiencia en 45 años de labor, indicó que nunca había vivido una situación parecida pese a constantes cambios económicos.
“Estamos siendo acosados sin ningún motivo, estamos cumpliendo una función pública con atención adecuada y al servicio de nuestro pueblo. Además, deben considerar que el frigorífico más pequeño cuenta con más de 6 trabajadores, a quienes se les debe cancelar su salario. Nosotros también tenemos hijos y también somos pueblo”, expuso.
Esperan respuestas satisfactorias con el Indepabis, de no resultar así, se verán en la obligación de paralizar las actividades.
“Las políticas económicas del país deben ser estudiadas, no es casualidad que exista desabastecimiento de rubros alimenticios y de productos de primera necesidad”.
