La Unidad tiende la mano

Este momento nacional requiere posiciones claras, pulso firme y mente serena. Hay mucha protesta pero, sobre todo, muchas y muy buenas razones para protestar. Claro eso, cuyo entendimiento es esencial como la semana pasada pudieron leer en este mismo espacio, dígase también que la protesta, es parte de una lucha cívica que es en la calle, en la opinión pública y desde las instituciones. En una de ellas, el Parlamento, una grave ceguera de origen ideológico es excusa de la mandonería para impedir que allí se cumpla la función deliberante.
¿Cuáles son los puntos en la agenda de lucha civil de la Unidad?
Los venezolanos estamos hartos de la violencia. Todo el pueblo venezolano está siendo agredido. Como alternativa al puño violento y generador de más violencia, la Mesa de la Unidad Democrática da su mano abierta a todo el pueblo venezolano. ¿Por qué luchamos hoy? Nuestra agenda tiene cinco puntos, como cinco dedos.
El primero es la Libertad para Leopoldo López, Iván Simonovis y para todos los presos políticos, el regreso de los exiliados, y la anulación de los juicios de criminalización de la disidencia. Eso incluye, desde luego y muy señaladamente, esos procesos que como en pesca de arrastre se han iniciado masivamente contra estudiantes y manifestantes.
El segundo es justicia. Justicia para todas las víctimas de la represión y la violencia de estos días. Para todas. Cero impunidad. Y como parte de esa justicia desarme y desmovilización verificable de los grupos paramilitares y parapoliciales denominados “colectivos”.
El tercero y el cuarto se refieren a la raíz del descontento. Alto al Hambre, al racionamiento y a las colas! Cese a la corrupción y la ineficiencia, y abandono del modelo político-económico que causan la escasez y los precios altos. Reactivación inmediata del aparato productivo. Eliminación de las leyes y normas que sabotean la capacidad productiva. Y, en seguida, Alto a la inseguridad y a la delincuencia! Que todos los recursos humanos, logísticos y financieros, todas las armas y equipos que se han usado en la represión contra los estudiantes y el pueblo, usarlas en la lucha contra el hampa.
El quinto punto se refiere al diálogo. Diálogo verdadero, con una agenda clara, en igualdad de condiciones y con transmisión en vivo por los medios de comunicación con presencia de un tercero de buena fe, nacional o internacional, que garantice, facilite o medie.
Y la palma de esa mano tendida, el centro de la propuesta, es cumplir la Constitución. Garantizar a los estudiantes, a los trabajadores, en barrios y urbanizaciones de todo el país, el respeto a sus derechos. Respeto al fuero de gobernadores y alcaldes, y eliminación de gobiernos paralelos; regularización democrática del funcionamiento de la Asamblea Nacional, eliminación de la injerencia cubana en todo el aparato estatal venezolana y, muy importante para la paz verdadera y duradera que se ha de lograr: la equilibrada renovación de los poderes públicos. Para que el CNE, el Tribunal Supremo, el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y la Contraloría recuperen la confianza del país entero.
Es la mano abierta que la Unidad tiende a todo el país, para que todos podamos vivir y progresar en paz.