Italia ha decidido su estrategia para la semifinal de la Copa Confederaciones contra España el jueves: correr más que los campeones mundiales.
Según cree el técnico de Italia, Cesare Prandelli, es imposible equiparar la capacidad de los españoles en posesión de pelota o precisión de pases. Por eso, en el entrenamiento del lunes prevaleció la velocidad sobre la táctica.
Los jugadores de la Azurra, al menos los que han sobrevivido a una serie de lesiones, hicieron embalajes de un extremo a otro de la cancha unas diez veces seguidas en determinado momento, y después se detuvieron para que les auscultaran el latido cardíaco.
«Nos hemos convencidos de que contra España será una batalla de sufrimientos», comentó el técnico Prandelli. «Su posesión de pelota es superior a la nuestra y los españoles son increíbles en sortear toda trampa tendida por los adversarios. Son excelentes para mantener la posesión y para el ataque, de modo que tenemos que hacerlos correr todo lo posible».
Está por verse, de todo modo, si sus jugadores tienen las energías como para ejecutar ese plan.
Otro mediocampista, Daniele De Rossi, se perdió el partido con Brasil por doble tarjeta amarilla. Por lo menos De Rossi fue uno de los jugadores más dinámicos en el entrenamiento y tanto él como Emanuele Giaccherini fueron los dos más veloces en la práctica.
Claro que el mero hecho de correr no alcanzará contra España, que el año pasado apabulló a Italia por 4-0 en la final de la Eurocopa 2012.
«España está mucho mejor que en ese entonces, si se tiene en cuenta la facilidad con que ha avanzado y lo sólido que se ha mostrado», dijo Prandelli. «Tiene una identidad precisa y es sin duda el favorito».
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