El pasado miércoles la Organización Internacional del Trabajo (OIT), presentó el informe: Formalizando la Informalidad Juvenil, en el que destaca, entre varios detalles, que seis de cada diez jóvenes de América Latina y el Caribe, laboran bajo condiciones informales.
Sobre este respecto, la abogada especialista en materia laboral, Mariolga Girán, sostiene que en líneas generales las condiciones de empleo en Venezuela no son favorables, debido a la escaza formulación de puestos y fuentes de trabajo, como consecuencia de la falta de inversión.
“Los jóvenes no tienen donde insertarse porque no hay nuevos empleos, sumado a que la inamovilidad ha hecho que el mercado laboral pierda dinamismos”, comentó Girán, quien lamenta que un grueso de personas, sin productividad alguna, estén cobrando sueldos sin trabajar, “enquistados” en los puestos trabajo, lo que le quita la oportunidad laboral a jóvenes y otros profesionales capacitados.
Sueldos más bajos del mundo
A esto agregó que la compleja situación económica del país resta incentivo para que los jóvenes se queden en el país, por lo cual son muchos los que deciden probar suerte en el exterior.
Subrayó que en Venezuela no existen buenos salarios. Por el contrario, son los más reducidos en el mundo, ya que si se calcula a tasa del Sistema Marginal de Divisas (Simadi), un venezolano promedio puede devengar $28 mensual.
“Es muy poco lo que una persona está ganando al ingresar al mercado laboral”, comentó Girán, quien indicó que en cualquier otro país del mundo una persona gana más de lo que obtiene en Venezuela.
El informe OIT
El estudio también advierte que la informalidad en el empleo juvenil afecta en la zona de estudio a 27 millones de jóvenes, cuyas edades oscilan entre los 15 y 24 años.
Asimismo, especialistas en la materia laboral, destacan la importancia de que los jóvenes sean insertados tempranamente al mercado laboral formal, ya que así no sólo forman vínculos de compromiso con el referido esquema, sino que también se preparan para ascender en el mercado.
Es de destacar, que los representantes de la OIT alertan sobre la situación, ya que estos jóvenes estarían laborando sin garantías básicas, seguridad social, plan de pensión o accesos a microcréditos.
