Un hueco en el que muchos carros han caído y destrozado sus neumáticos, y otros dañado algunos de los componentes del tren delantero no ha sido reparado en la rejilla de una alcantarilla situada en la calle Madrid, frente a la sede del Conservatorio de Música Vicente Emilio Sojo, al este de Barquisimeto.
La zona, altamente transitada, requiere a la mayor brevedad que la autoridad competente solvente el problema y evite más perjuicios a conductores que transitan por el lugar.
Más dramático todavía se hace en horas de la noche por la oscuridad, debido a que la calle carece de suficientes bombillas del alumbrado público y las personas al no ver el orificio son sorprendidos por este y caen en su profundidad.
Laura de Mendoza deploró la negligencia del municipio para restablecer los hierros de la alcantarilla, y lo responsabiliza por las lesiones que cualquier, inclusive, la muerte persona se ocasione por esta causa.
Mendoza rechaza que haya pasado tanto tiempo desde que se presentó el problema y que no exista preocupación para una solución, visto que se trata de un caso de interés público y colectivo.
En este sentido, manifestó que vecinos debieron colocar objetos como palos, cartones y bolsas negras contentivas de basura alrededor del hueco para advertir a conductores y peatones del inminente peligro.
Espera que este hueco no reciba el nuevo año.
Por otra parte, Néstor Hurtado criticó que vendedores ambulantes de frutas, discos compactos, películas y panes de jamón obstruyan el canal de circulación lenta en la calle Madrid, perjudicando el derecho de otras personas de caminar y conducir con libertad.
Le hizo un llamado a la Policía Municipal para que haga cumplir las ordenanzas, en beneficio de todos los que utilicen dicha zona.
Además, habló de un bote de aguas negras que afecta los alrededores de la escuela de música.
