Guaros de Lara (17-19) está obligado a triunfar en lo que resta de temporada regular de la Liga Profesional de Baloncesto, porque de lo contrario puede ser apartado por Trotamundos de Carabobo (17-18), que en este momento se encuentra dentro de la clasificación a la siguiente ronda si el torneo llegara a cerrar este domingo.
El equipo centroccidental enfrenta a Panteras de Miranda (12-24) hoy a la 1.00 de la tarde en el gimnasio José Joaquín “Papá” Carrillo, ubicado en la avenida Rómulo Gallegos de Los Dos Caminos en Sebucán, al este de la ciudad de Caracas, donde busca vencer y empezar un descuento que le permita avanzar decididamente.
El conjunto larense, en apariencia, confronta a un rival cómodo, aun cuando así se pensaba cuando lo hacía el jueves contra Toros de Aragua en el Coliseo El Limón o el Rafael Romero Bolívar de Maracay, al que superó 93 a 89, diferencia de cuatro, en el partido inicial que presagiaba favorables expectativas.
Pero el viernes 19 de abril, que conmemora la firma del Acta de Declaración de la Independencia de Venezuela, sufrió una derrota 89 a 85, ventaja de cuatro, que todavía duele mucho no solo en el entorno de la organización sino de la afición que sigue su huella en todo el país. Haber dividido en el Parque Miranda es algo difícil de digerir.
Toros, último en la tabla de clasificación de la Liga, en ocasiones mete la zancandilla, la que por cierto perjudicó a Guaros cuando acá se pensaba en una barrida en los dos encuentros. Panteras, antepúltimo, también presenta esa característica y supone que el elenco visitante es capaz de alcanzar una victoria holgada.
Pero es bueno aclarar una cosa: en la temporada regular de la Liga jamás se puede creer en los enemigos pequeños. Ese axioma no se ajusta nunca a una realidad tangible, porque aquel o aquellos considerados en desventajas a veces se les sale la clase y colocan contra la pared a cualquiera que en el papel se ve inmenso. Por eso es necesario ganar.
Interioridades
Guaros vive interiormente un instante muy complejo. Las lesiones, por un lado, han hecho mella en el equipo y hasta varias discusiones entre jugadores ponen el grupo en una situación bastante incómoda. Pero algunos dejan pasar la bola, como dicen los protagonistas y especialistas en los deportes.
En la era del estadounidense Scott Fields se produjeron altas y bajas. Cuando se gana se celebra, pero a la hora de perder el panorama cambia del cielo a la tierra y siempre la culpa recae en el técnico. Por eso es apartado Fields del cargo y, en su lugar, es ascendido uno de sus asistentes, el dominicano norteamericano Derrek Baker.
A las lesiones de René Farías y Kervin Bracho se sumaron otras, incluida la del base norteamericano Salim Stoudamire y la actual separación del piloto Heissler Guillent por medidas estrictamente disciplinarias. Frente a esta realidad, la gerencia administrativa se ha visto en la necesidad de contratar los servicios del alero estadounidense DerMarr Johnson y el base dominicano Gerardo Suero.
Guaros regresa el próximo martes al Domo Bolivariano, para recibir a las 7.30 de la noche a Gigantes de Guayana (19-17), que pelea el cuarto lugar con Bucaneros de La Guaira (18-16), al que confronta la divisa larense el viernes a las 7.30 pm, para descansar el sábado y retornar el domingo ante Gaiteros del Zulia (19-16) a la 1.00 de la tarde en el escenario de Barquisimeto.
