Estrategia Inteligente evita pérdidas de energía

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Todos los aspectos relacionados con el consumo eléctrico mundial y con su contraparte, que se traduce en el ahorro energético obligatorio, han inspirado a los expertos a desarrollar y promover campañas de reflexión para que las sociedades ahorren energía eléctrica. A esto, se le une la campaña masiva en contra del consumo fraudulento, que es uno de los problemas que se presentan en la actualidad.

Este llamado a la reflexión no se limita a los hogares, sino también a las empresas, las cuales deben contribuir al programa de soluciones que, a largo plazo, garanticen el desarrollo económico que permita una mejor calidad de vida a la población.

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Propuesta de Estrategia Inteligente

Estos aspectos motivaron a la doctora Liliana Lima Pérez, docente del Departamento Estudios Generales y Básicos del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo, a realizar una interesante investigación, en la cual desarrolló una Estrategia Inteligente, denominada Eiesel.

Se trata de una Máquina de Soporte Vectorial que clasifica a los clientes de las empresas de servicio eléctrico en inspeccionables y no inspeccionables en base a los consumos de energía eléctrica y un Sistema Experto construido con la información aportada por expertos en inspecciones de suministros de empresas de servicio eléctrico, que genera un listado de los posibles clientes con condiciones fraudulentas, seleccionado de los inspeccionables.

Esta Estrategia Inteligente integra la información aportada por los expertos en planificación de inspecciones de suministros en empresas de servicio eléctrico obtenida a través de la Técnica Delphi, aspecto poco utilizado en esta área investigativa.

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Antecedentes

Las empresas de servicio eléctrico alrededor del mundo deberían facturar toda la energía que generan, sin embargo, esto no sucede, ya que se presentan pérdidas de energía. En países, tales como India, Bangladesh, Pakistán, Ecuador, Brasil, entre otros, estas pérdidas pueden llegar a ser superiores al 20%. Diferente situación se presenta en países desarrollados, donde las pérdidas están por debajo del 10%, valor máximo recomendado por la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) como aceptables.

En Venezuela, las pérdidas de energía para los años 2010 y 2011 fueron de 30,68% y 31,91%, respectivamente, según el Anuario Estadístico del Mppee. Unas, ocurren en los propios sistemas de generación, transmisión y distribución, llamadas pérdidas técnicas; y otras por diversas fallas comerciales, manipulación de los medidores de consumo, de las acometidas, conexiones ilegales o por procesos administrativos deficientes, que reciben el nombre de pérdidas no técnicas.

Ambas inciden en la productividad de las empresas de servicio eléctrico, pero las primeras ameritan de importantes inversiones para ser reducidas y al corregirlas no hay recuperación financiera. Las segundas, pueden ser manejadas de manera técnica y organizada y requieren de menor inversión. Esto ofrece a las empresas la posibilidad de recuperación financiera aplicando las leyes jurídicas existentes para contribuir con su sustentabilidad. De éstas, el mayor porcentaje lo ocupan las pérdidas no técnicas.

Las pérdidas no técnicas ocasionan daños a la sociedad, ya que al realizar algunas de estas actividades por parte de los usuarios se pueden generar sobrecargas en las líneas de distribución y transmisión que ocasionan interrupciones en el servicio y, por lo tanto, inciden en el daño a equipos eléctricos y deteriora la calidad del servicio, generando mayores gastos de mantenimiento.

Adicionalmente, la manipulación de las acometidas o de los medidores de consumo de energía eléctrica, por personas no expertas, puede generar cortocircuitos que ocasionen daños irreparables a estructuras e incluso la muerte de ciudadanos. Por otra parte, no facturar la energía entregada afecta la productividad de las empresas de servicio eléctrico lo cual interviene en su sustentabilidad.

Ley Orgánica del Sistema y Servicio Eléctrico

En tal sentido, la doctora Lima Pérez señala que diferentes medidas se han tomado para corregir este problema. Unas de carácter punitivo como la aplicación de la Ley Orgánica del Sistema y Servicio Eléctrico, en la cual se penaliza con multas y sanciones penales a los clientes con condiciones fraudulentas. Otras están orientadas a la instalación de equipos tecnológicamente avanzados (medidores electrónicos multifunción y de lectura automática, cables antirrobo y subterráneos, medidores prepagados, mecanismo de monitoreo constante para los balances de energía por transformador, medidores sellados) que requieren de una importante inversión.

Señala que también son implementadas campañas publicitarias y educativas para concientizar en el correcto uso de la energía y crear cultura de pago. En cuarto lugar, se realizan inspecciones de suministros para detectar clientes con condiciones fraudulentas. Esta medida es considerada por la Olade como la más importante para el control de las pérdidas no técnicas.

Para que las inspecciones de suministros sean eficientes se debe realizar una planificación que las oriente adecuadamente. En este sentido, se han aplicado varias estrategias como la selección aleatoria, utilización de filtros manuales, aplicación de modelos estadísticos y el uso de inteligencia artificial para automatizar la selección en bases de datos de numerosos suscriptores, entre otras.

Afirma que las empresas de servicio eléctrico dan prioridad para las inspecciones de suministros al abordaje de los clientes de alto consumo (industriales); en segundo lugar, a los de medio consumo (comerciales) y, por último, a los de bajo consumo (residenciales). Sin embargo, en general, el porcentaje de clientes residenciales supera el 85% (en Venezuela son 5.114.759), lo cual hace necesario contar con una herramienta que de manera automatizada pueda reconocer las características de los consumos de clientes residenciales con condiciones fraudulentas.

Por otra parte, Lima Pérez considera que al ser una conducta humana es cambiante en el tiempo, por lo tanto el sistema debe aprender, acción que hacen los Sistemas Basados en Conocimiento de la inteligencia artificial.

Investigación unexpista

A través de su investigación en el Doctorado en Ciencias de la Ingeniería, Mención Productividad, dictado por la Dirección de Investigación y Postgrado del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo, la doctora Liliana Lima Pérez explica los beneficios de su Estrategia Inteligente, denominada Eeisel, cuya información suministrada a través de las inspecciones de suministros de empresas de servicio eléctrico, se obtiene una lista de los presuntos clientes con condiciones fraudulentas.

En los casos reportados como sistemas expertos no se incluye la información ofrecida por los expertos en planificación de inspecciones de suministros de las empresas de servicio eléctrico, ni la forma de obtenerla.

La evaluación de la eficiencia

Eiesel utiliza el consumo de energía eléctrica de seis (6) meses de los clientes, esto reduce el costo computacional con respecto a otros sistemas que usan 24 o más registros del histórico y la posibilidad de detección temprana. Su eficiencia fue evaluada en la Zona Oeste 1 de Corpoelec Lara constituida por 16.260 suscriptores, obteniéndose, en un tiempo aproximado de dos (2) minutos y medio, un listado de 161 clientes con sospecha de condiciones fraudulentas y una eficiencia que duplica la encontrada a través de filtros manuales aplicados por la empresa en la misma zona.

Plan Integral de Pérdidas Eléctricas

Adicionalmente, los expertos en planificación de inspecciones de suministros consultados indican la necesidad de proponer un Plan Integral de Pérdidas Eléctricas (Planipe). Estos especialistas exponen que para el control de pérdidas no es suficiente detectar a los clientes con condiciones fraudulentas, es necesario abordar el problema de manera general e integral.

El propósito es intervenir en las diferentes áreas para controlar las pérdidas no técnicas, considerando que se debe cerrar el ciclo comercial integrando adecuadamente cinco (5) componentes, el gerencial, administrativo, técnico, educativo y legal, cumpliendo un conjunto de requisitos que conduzca a un control de pérdidas que incida positivamente en la sustentabilidad financiera y económica de las empresas de servicio eléctrico.

El gerencial desde donde se establecen la misión, visión, objetivos y políticas, así como el apoyo económico para la ejecución del plan; el administrativo, encargado del proceso de facturación y cobro; técnico, desde el cual se establecen las estrategias técnicas para el control de pérdidas, en el cual queda insertada Eiesel; educativo para estimular en las comunidades la cultura de pago, el uso eficiente de la energía eléctrica y la correcta conexión al sistema y, por último, el legal que se encarga de aplicar las leyes regulatorias y sancionatorias correspondientes.

La implementación de Eiesel y Planipe conforman una arista de las estrategias necesarias para el funcionamiento eficiente de las empresas de servicio eléctrico que las haga productivas y brinden un servicio de calidad. Sin embargo, lo más importante es concientizar a las comunidades en el uso eficiente de la energía y en crear la cultura de pago, insistiendo en que es un aporte que se reinvierte para mejorar el servicio.

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