Las industrias venezolanas no cuentan con un programa de prevención de accidentes químicos, en especial aquellas empresas que utilizan baterías que contienen ácido sulfúrico y plomo, como las compañías telefónicas o de electricidad, motivo por el cual el licenciado en estudios ambientales, Deivis Rosales, elaboró un proyecto con las indicaciones necesarias a objeto de evitar una contaminación masiva.
El peligro que representan estas fuentes de energía es que una vez han cumplido su vida útil, deben ser almacenadas en lugares aptos para contener materiales tóxicos.
El ambiente para conservar las baterías no debe ser cálido, el suelo debe ser impermeable y no pueden compartir el depósito con otros químicos, porque podría generar una mayor contaminación.
Algunas instituciones, ante la falta de conocimiento de los compuestos de las pilas, las han almacenado en zonas abiertas, exponiéndolas a altas temperaturas.
La falta de cuidado en estos materiales trae como consecuencia que el ácido y el plomo que contienen las baterías sea expulsado en sus estados líquidos y gaseosos. Las personas al tener contacto con estos elementos podrían sufrir irritaciones en las fosas nasales y ojos, erupciones en la piel, hasta quemaduras.
Además, el ácido al ser absorbido por la tierra podría llegar a pozos de agua aptas para el consumo humano, por lo que al ser consumida traería graves consecuencias.
En criterio de Rosales estos diseños han sido ignorados por las compañías del país, en especial las controladas por el Gobierno.
Según un congreso realizado con diversos representantes de países latinoamericanos, otras naciones acordaron llevar a cabo estos planteamientos preventivos.
“Cada país elaboró sus programas y los puso en práctica, mientras que en Venezuela simplemente se elaboró un informe” explicó el licenciado.
Entre las previsiones plasmadas en la investigación de Rosales, explica los métodos a utilizar por las empresas, entre las que destaca utilizar un uniforme adecuado para el manejo de estos químicos, marcar con una etiqueta el peligro al que se enfrentan los trabajadores.
Todas estas recomendaciones están dirigidas según lo establecido en el decreto 2.635 de la Ley sobre Sustancias, Materiales y Desechos Peligrosos, el cual regula la generación, uso, transporte y disposición final de estos elementos.
Baterías Ácido-Plomo
Estas baterías son utilizadas para generar electricidad cuando se producen fallas de energía. Entran en funcionamiento en el momento en que los sistemas se apagan.
Por lo general están conectadas en cantidades.
Para el traslado de estos generadores es necesario contar con medios de transporte especiales, según la investigación realizada
